Revilla dice que sería "una mala persona" si no votara a Zapatero para que culmine los proyectos en marcha en Cantabria

Actualizado: miércoles, 20 febrero 2008 18:26

Asegura que Ibarretxe sabe que su pretendido referéndum es "una ilegalidad de libro" que no va a poder celebrar

MADRID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, aseguró hoy que sería "una mala persona" si no diera su apoyo al presidente del Gobierno y candidato a la reelección, José Luis Rodríguez Zapatero, en las próximas elecciones generales después de todo lo que dice que ha hecho por su comunidad. "Quiero que siga otros cuatro años más para que culmine lo que está en marcha en Cantabria", subrayó.

Así lo señaló durante el almuerzo informativo organizado en Madrid por Nueva Economía Forum, en el que estuvo arropado por la cabeza de lista del PSOE por Cantabria y ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, así como por diversos empresarios, entre los que destacaron los presidentes del Banco Santander, Emilio Botín; de Telefónica, César Alierta, o de El Corte Inglés, Isidoro Álvarez.

Revilla dijo no entender el revuelo que su apoyo público al jefe del Ejecutivo ha generado, y apuntó que sería una "mala persona" si no hubiera tenido este gesto con él después de que durante su mandato se hayan desbloqueado asuntos "impensables", entre los que citó la autovía del agua o el proyecto Comillas.

El presidente cántabro manifestó su deseo de que el aspirante socialista a la Presidencia del Gobierno continúe en el poder cuatro años más para poder culminar "lo que está en marcha" en Cantabria y reafirmó su decisión "libre y meditada" de votarle. "Lo mejor para Cantabria es que siga este Gobierno socialista y por eso le voy a votar", insistió.

ZAPATERO "NO ES UN ANTICRISTO".

En este sentido, y preguntado sobre si estaría dispuesto a afiliarse al PSOE dada la afinidad política y personal que se le atribuye con Zapatero, Miguel Ángel Revilla respondió que ésa es una idea que no se le pasa por la cabeza y que morirá siendo militante del PRC (Partido Regionalista de Cantabria).

En cualquier caso, Revilla aprovechó su conferencia para recalcar que Zapatero, a quien presumió de conocer bien, es "una buena persona, y no un anticristo" como, a su juicio, ha querido presentarlo el PP. "Puede ser un hiperoptimista y ha podido cometer errores --dijo--, pero (los 'populares') no le han dado tregua y, además, han hecho una campaña contra él terrible".

En concreto, reprobó al principal partido de la oposición su crítica a la política antiterrorista llevada adelante por el Gobierno socialista y apuntó que se puede hacer crítica sobre este asunto "pero no desde el primer día".

EL "ÓRDAGO" DE IBARRETXE.

En otro orden de cosas, a Revilla se le preguntó sobre la pretensión del lehendakari, Juan José Ibarretxe, de celebrar un referéndum en el País Vasco el próximo 25 de octubre. A este respecto, el jefe del Ejecutivo cántabro criticó el "órdago" que su homólogo vasco se ha marcado con esta consulta, si bien quiso dejar claro que el Gobierno "se lo va a parar" porque tiene que "hacer cumplir la Ley".

"El lehendakari, que no puede olvidar que es el representante del Rey en su territorio, como yo lo soy en el mío, sabe que su propuesta es una ilegalidad de libro y, por tanto, si finalmente convoca la consulta, no se le va a permitir realizarla", sentenció.

Asimismo, durante el almuerzo al presidente cántabro se le cuestionó sobre su retirada de la política tras la culminación de su legislatura actual, ocasión que aprovechó para confirmarlo, aunque no sin hacer gala de su sentido del humor. Revilla confesó que sus compañeros de partido le han recomendado no hablar sobre este asunto, por lo que se limitó a decir que "lo dicho, dicho está".

Volvió a utilizar el mismo tono para responder a una pregunta sobre su empeño en mantener su imagen de "aldeano simpático". Tras recordar su procedencia, Polaciones, y sus humildes orígenes, negó en que se esfuerce en aparentar algo que ya es.

"Soy un hombre de pueblo y no hago ningún esfuerzo en parecerlo", recalcó el presidente cántabro, quien no quiso finalizar el almuerzo sin proclamar dos vivas durante el brindis. "¡Viva Cantabria! y ¡Viva España", exclamó.