9-M.- San Gil critica que Urkullu base su "plan de trabajo" en "la consulta de Ibarretxe y los papeles de Loiola"

BILBAO, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -

La presidenta del PP del País Vasco, María San Gil, criticó hoy que el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, base "su plan de trabajo en la consulta de Ibarretxe, un referendum ilegal, y los papeles de Loyola, fruto de una reunión con Batasuna, un partido ilegalizado". En este sentido, denunció que los dirigentes nacionalistas "pretenden trabajar en clave de cohesión con quienes son ETA-Batasuna, en vez de trabajar por la democracia y la libertad".

La dirigente del PP vasco clausuró en Bilbao el acto de presentación del programa electoral elaborado por esta formación para Euskadi, en el que participaron los cabezas de lista al Congreso por Álava, Vizcaya y Guipuzcoa, Alfonso Alonso, Ignacio Astarloa y José Eugenio Azpiroz, respectivamente.

San Gil destacó que el programa que su partido presentará a las próximas elecciones generales tendrá como "eje fundamental y prioritario" la defensa de la libertad y la derrota del terrorismo, así como lograr que Euskadi recupere su "protagonismo económico".

En este sentido, criticó que durante la actual legislatura se ha producido "un retroceso" en materia de defensa de la libertad y derrota del terrorismo, porque "no se ha hecho nada". A su entender, durante los "cuatro años de desgobierno de un insensato", los vascos han "padecido en primera persona ese desgobierno".

De este modo, se mostró convencida de que el PP va a recibir en los comicios de marzo el respaldo de "muchos ciudadanos" que en las anteriores elecciones "votaron con ilusión y esperanza" a José Luis Rodríguez Zapatero y ahora se encuentran "enormemente defraudados".

La presidenta del PP vasco criticó que el líder del PSOE se presentó a las elecciones de 2004 con un programa que incluía el Pacto Antiterrorista y la Ley de Partidos, pero "inmediatamente aparca estos dos instrumentos del Estado de derecho y se dedica a legitimar a ETA como un interlocutor político y a utilizar la política antiterrorista en clave de interés propio e interés electoral".

Según añadió, "no puede ser que, en las últimas elecciones forales y municipales, porque nos encontrábamos en el mal llamado proceso de paz, porque estábamos en la falsa tregua, a Zapatero le interesara legalizar a ANV, la legalizara y permitiera que se presentara a las elecciones. Y en estas elecciones generales, como no le interesa que ANV tenga un protagonismo político y sí le interesa hacernos creer que tienen intención de sacarles de las instituciones a quienes no representan a los demócratas, ahora sí les va a ilegalizar".

En este sentido, reclamó que "no se puede utilizar la política antiterrorista en clave electoral", sino que debe hacerse "pensando en la libertad del conjunto de los ciudadanos".

Del mismo modo, criticó que el presidente del Gobierno "nos ha mentido" y "no ha tenido rubor alguno en reconocer que había mentido al conjunto de los españoles". San Gil recordó que Rodríguez Zapatero dijo que "lo que había hecho tras la T-4 era una toma de temperatura" y replicó que "cinco reuniones con ETA son más que una toma de temperatura". En su opinión, es "vergonzoso" que un presidente de Gobierno "diga a los ciudadanos una cosa y esté haciendo por detrás la contraria".

"Lo peor en un político es perder la credibilidad y, hoy por hoy, ya no nos creemos nada de lo que dice Zapatero", aseguró María San Gil, que también explicó que su partido se dirigirá en la campaña electoral a los votantes nacionalistas "preocupados" por "la deriva radical e independentista de sus dirigentes" y quieren que Euskadi "forme parte de España".

En esta línea, criticó que el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, base "su plan de trabajo en la consulta de Ibarretxe, que es un referendum ilegal, y los papeles de Loyola, que son fruto de una reunión con Batasuna, que es un partido ilegalizado porque es ETA".

A su entender, "tenemos que estar enormemente preocupados de ver cómo los dirigentes nacionalistas pretenden trabajar en clave de cohesión con quienes son ETA-Batasuna, en vez de pensar en el conjunto de ciudadanos de este país y trabajar por la democracia y la libertad".

En este contexto, consideró que, en marzo, "habrá muchos votantes que quizá nunca habían votado al PP, pero que van a dirigir su mirada a Mariano Rajoy" ante los problemas ocasionados por "el desgobierno" de Rodríguez Zapatero.

USO DEL CASTELLANO

Por su parte, el candidato por Vizcaya al Congreso Ignacio Astarloa aseguró que su partido ofrece "un proyecto común para toda España", frente a "proyectos de ruptura" y la "debilidad máxima" con la que José Luis Rodríguez Zapatero "no ha sabido afrontar el desafío de los partidos nacionalistas".

Su partido, según indicó, plantea una reforma de la Constitución para "reforzar el Estado Autonómico y no para desguazarlo", en la que uno de los elementos centrales será el reconocimiento del derecho a "usar la lengua común sin límite", defendiendo la "libertad lingüística" en todos los ámbitos y, en especial, en la educación y la función pública.

En materia de educación, el PP apuesta por la defensa de la educación en la lengua materna y el derecho a que los padres elijan el idioma en el que quieren que sus hijos estudien, frente a "la imposición" del catalán y el euskera en las comunidades autónomas catalana y vasca.

En este sentido, explicó que su partido se comprometerá a que "la regulación de la enseñanza de la lengua oficial del Estado sea competencia exclusiva de las cortes generales a través de una ley orgánica que establecerá las garantías de su enseñanza y de su uso en todos los grados docentes y académicos en toda España". Asimismo, garantizará igualmente el bilingüismo en las comunidades autónomas con lenguas cooficiales.

También pretende regular las condiciones de acceso "en términos de igualdad a las funciones públicas en todas las administraciones de España" con el fin de garantizar "el criterio de capacidad en el acceso al empleo público" y lograr "mejores servicios públicos" especialmente en materias como Justicia, Educación o Salud. De esta manera, según indicó Astarloa, se busca que el acceso a la función pública se produzca en función del "mérito y capacidad", en lugar del nivel de conocimiento de la lengua.

RETOMAR LA METODOLOGÍA TRADICIONAL

Por su parte, el candidato guipuzcoano José Eugenio Azpiroz defendió el Concierto Económico como "un instrumento fundamental" del autogobierno vasco y señaló la necesidad de renegociar un nuevo acuerdo del Cupo que "retome la metodología tradicional" y garantice la estabilidad del sistema financiero fiscal, "blindándolo".

El candidato del PP se mostró convencido de la "compatibilidad" del sistema vasco con las normas de la UE "siempre que no se hagan inventos" que derivan en otorgar "dádivas económicas" al Gobierno vasco "como contraprestación de otros apoyos" al Ejecutivo central. Asimismo, criticó que es "inasumible" que existan distintos tipos del Impuesto de Sociedades en los territorios vascos y defendió que, en las tres provincias vascas, "pueda asimilarse" la reforma fiscal que plantea el PP en el IRPF y el Impuesto de Sociedades con "rebaja importantísima".

El cabeza de lista por Álava, Alfonso Alonso, defendió la necesidad de impulsar el desarrollo de infraestructuras como el tren de alta velocidad, la integración del ferrocarril en las ciudades o la prolongación a la localidad cántabra de Castro en la línea Bilbao-Muskiz. También apostó por los proyectos de conexión del aeropuerto de Foronda y la ampliación del de Fuenterrabia.