Trinidad Jiménez afirma que Blanco viajará a Cuba para "retomar contactos" y no para preparar la visita de Zapatero

Asegura que "no existe ninguna ola" contra los intereses de las empresas españolas en Iberoamérica MADRID 4 Nov. (EUROPA PRESS) -

La secretaria de Estado para Iberoamérica, Trinidad Jiménez, declaró hoy que la visita que comenzará mañana a Cuba del vicesecretario general del PSOE, José Blanco, es para "retomar contactos" y no para preparar una posible visita a la isla del presidente del Gobierno, Jose Luis Rodríguez Zapatero, ya que eso le correspondería prepararlo "solamente a miembros del Gobierno". "Considero que puede ser un buen momento para tomar un pulso de cómo evoluciona la situación, y creo que España no puede estar ausente en un país donde existen unos lazos tan intensos", explicó, en declaraciones a Onda Cero, recogidas por Europa Press. Asimismo, Jiménez dijo que la visita se enmarca dentro de "los contactos que deben ser habituales para hacer el seguimiento y evolución de lo que pueda ocurrir" en Cuba.

Respecto a la eventual visita del presidente del Gobierno, subrayó que "era habitual que un presidente viaje a un país donde hay tantas relaciones". Por ese motivo, comentó que aunque no visitara Cuba en la legislatura anterior, Zapatero "ha evaluado la posibilidad de ir".

ELECCIONES A LA PRESIDENCIA NORTEAMERICANA

Por otra parte, al ser preguntada por su preferencia entre los dos candidatos que optan a la presidencia de Estados Unidos, la secretaria de Estado para Iberoamerica aclaró que no se pronuncia porque prefiere "esperar a que los ciudadanos norteamericanos lo hagan".

No obstante, admitió que "en numerosas ocasiones" el Gobierno ha mostrado sus preferencias "hacia aquellos que representan una opción ideológica más afin". A su juicio esto es "es natural y lógico", aunque aseguró que "el Gobierno español estará pendiente del candidato que decidan los ciudadanos" y "lo respetará".

La dirigente no quiso valorar las declaraciones del ministro de Industria, Miguel Sebastián, cuando se alegró públicamente de que quedaran pocos días para que finalizara el mandato del presidente de Estados Unidos, George W. Bush. En su opinión, se debe tratar de mantener "la corrección política en las relaciones con los adversarios políticos". En este sentido, quiso subrayar que "más allá de la falta de sintonía personal que podía existir entre los presidentes", la relación de España con Estados Unidos "es buena e intensa".

Jiménez cree que el cambio de presidente "supone una apuesta más fuerte por el multilateralismo, por la acción concertada de las iniciativas en el ámbito internacional y por el reforzamiento de los organismos internacionales,financieros y políticos". En su opinión, "significa una nueva era que exige concertar, coordinar posiciones y tomar iniciativas en conjunto".

LA CUMBRE DE WASHINGTON

Sobre la presencia española en la cumbre del G-20 del próximo 15 de noviembre, Jiménez defendió que "España tiene el derecho de estar y toda la legitimidad para reivindicar estar". Además, explicó que debe estar por "su posición en el mundo y por ser un país que ha sabido responder de manera sólida a la crisis". "Estamos trabajando para lograr que España esté en el G-20, y en este momento se está diseñando la manera de poder estar y de argumentar y justificar nuestra presencia", subrayó. Por el momento, cree que "España estará" en la cumbre, y aseguró que España "seguirá reclamando su derecho a estar presente".

Jiménez consideró la cumbre de Washington como "una reunión que definirá una nueva arquitectura financiera internacional". "No hemos estado en otros momentos, pero creemos que ahora es el momento para que España esté presente", apostilló.

SITUACIÓN DE LAS EMPRESAS ESPAÑOLAS EN IBEROAMERICA

Respecto a la situación que están viviendo las empresas españolas en algunos países de Iberoamérica, la secretaria de Estado, afirmó que "no existe ninguna ola" contra los intereses de las empresas españolas.

"Existen muchas relaciones, muchos intereses y mucha inversión de los empresarios españoles en América Latina", subrayó. Por este motivo, es "muy normal" que "pueda haber fricciones" entre una empresa y un Gobierno, pero, "en general las empresas españolas están satisfechas con sus inversiones en América Latina".

Jiménez declaró que "es muy raro" que una empresa "abandone América Latina" o "se sienta obligada a hacerlo". Además, citó que "los beneficios son importantes" y que "suponen un 30% de beneficios de las empresas españolas" en países latinoamericanos.