MADRID 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los siete detenidos esta madrugada en San Sebastián (Guipúzcoa) elevan a 18 el número de arrestados por la Policía en los últimos tres meses en las tres provincias vascas por actos de violencia callejera y presunta vinculación a la banda terrorista ETA. Así, la operación de la pasada madrugada se suma a la desarrollada en octubre en Vizcaya, con siete detenidos, y a la llevada a cabo en Alava en verano, con seis arrestados. De estos 13, dos arrestados fueron puestos en libertad posteriormente.
En el operativo de esta madrugada, la Comisaría General de Información del Cuerpo Nacional de Policía desarticuló un presunto grupo de apoyo a la banda terrorista ETA, que tenía como misión realizar atentados mediante la confección y el lanzamiento de artefactos explosivos e incendiarios contra los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, edificios oficiales, sedes de partidos políticos, entidades bancarias y de ahorro, estaciones y unidades de ferrocarril, transportes públicos y mobiliario urbano.
Como resultado de la operación, agentes de la Policía Nacional detuvieron a siete personas en distintos barrios de la ciudad de San Sebastián y practicaron al menos siete registros domiciliarios en los Barrios de Añorga, Intxaurrondo, Gros, Antiguo, Loyola y Amara. En ellos, se incautaron, entre otros efectos, un organigrama de la organización SEGI y varias CPUs que deberán ser analizadas por los expertos.
Según informó el Ministerio del Interior, los detenidos son P.M.L.E. de 22 años; J.G.P. de 22 años; E.A.C., de 19 años; E.I.A. de 20 años; U.P.Q. de 20 años; M.A.S. de 22 años y J.S.Z también de 22 años.
A los detenidos, todos nacidos en San Sebastián, se les imputan diversos actos de violencia callejera y sabotajes en la provincia de Guipúzcoa. En concreto, se les responsabiliza del incendio de un autobús de la Compañía del Tranvía de San Sebastián en la Alameda del Boulevard el 21 de diciembre de 2006, fecha en la que también lanzaron artefactos incendiarios sobre la fachada del Banco Guipuzcoano, esquina calle Narrica.
También son los presuntos autores de cortes de tráfico e intentos de quema de autobuses en mayo de 2007, así como del intento de quema de un autobús en el Boulevard, con graves disturbios e incidentes con la Policía Autonómica Vasca, en agosto de este año.
En septiembre de 2007 produjeron graves incidentes tras una manifestación de Askatasuna, con daños en mobiliario urbano y ataques a las fuerzas de seguridad. Además, el pasado 12 de octubre, con motivo de la celebración del Día de la Fiesta Nacional, dirigieron y participaron activamente en la cadena de graves disturbios que se produjeron en el centro de la ciudad con intento de quema de un autobús, graves daños en mobiliario urbano y contenedores y quema de la sucursal de la Caja de Ahorros del Mediterráneo de la calle Idiákez, entre otros. Finalmente, se les vincula al ataque a funcionarios del CNP durante las detenciones de miembros de la ilegalizada Batasuna el día 2 de octubre de 2007. DETENCIONES EN VIZCAYA
En la operación llevada a cabo en octubre, agentes de la Policía Nacional detuvieron de madrugada en Vizcaya, concretamente en la comarca de 'Uribe-Kosta', especialmente castigada por este tipo de actos, a Joseba Elorriaga, Txomin Gezuraga, Aner Mimenza, Mikel de Gregorio, Josu Rodríguez y Lander Labajo. Un día más tarde, en el marco de la misma actuación, fue arrestado en Getxo Zigor Goikoetxea.
El juez Baltasar Garzón ordenó prisión incondicional por pertenencia a banda armada y varios delitos de terrorismo para seis de los detenidos y dejó en libertad bajo fianza por motivos de salud a Zigor Goikoetxea, hermano de un etarra que participó en el atentado contra la casa cuartel de Durango.
Los detenidos confesaron su participación en, al menos, 11 sabotajes desde 2004. Entre los actos de 'kale borroka' figuran la quema de contenedores, lanzamiento de artefactos incendiarios contra sucursales bancarias y de seguros, "batzokis" (sedes sociales del PNV), corte de catenaria del Metro de Bilbao, apedreamiento de autobuses y varias algaradas callejeras.
ARRESTOS EN ALAVA
Tres meses antes, el pasado 10 de julio, agentes de la Policía Nacional llevaron a cabo otra importante operación contra el "núcleo dinamizador" de la violencia callejera en Alava que se saldó con la detención de Gorka Velasco, Koldo Moreno, Javier Fernández de Guzmán y Urko Arroy, único al que el juez de la Audiencia Nacional Garzón dejó el libertad, con la obligación de comparecer cada quince días en el juzgado.
Los cuatro, según la policía, estaban relacionados con ETA a través de la organización juvenil SEGI. En los registros de sus domicilios se intervinieron diversos artefactos incendiarios, material para la fabricación de otros, propaganda y documentación de la organización SEGI.
En el auto en el que se envío a prisión a tres de estos detenidos, el juez ordenaba la búsqueda y captura de otros dos miembros del grupo. Se trata de Federico Lomas, que en agosto se presentó de forma voluntaria en la Audiencia Nacional y para quien Garzón decretó prisión incondicional, e Ibai Peña, quien quedó en libertad con obligación de comparecer quincenalmente en el juzgado.
Lomas fue acusado de haber participado en el reparto de octavillas a favor del preso de ETA José Ignacio de Juana Chaos y en la organización de un acto de apoyo a su puesta en libertad y de la realización de pintadas amenazadoras con la firma de SEGI contra los partidos PNV y PSOE. Además, en su domicilio se intervino propaganda de la organización juvenil y un documento incluido en un CD en el que se reflejaba un listado de empresas de Vitoria con anotaciones y marcas, similar al intervenido en un apartamento alquilado por miembros de ETA en la localidad francesa de Dax en 2005.
La Policía les acusó de ser los responsables de un grupo de violencia callejera al que se atribuye la realización de más de cuarenta ataques cometidos en la capital alavesa desde 2004 y serían los máximos responsables de un grupo que venía operando en Vitoria durante los últimos tres años. A ellos se les atribuyen los diversos ataques sufridos por la Subdelegación del Gobierno, otros edificios públicos, oficinas bancarias, vehículos, entre otros.
Desde el inicio de la legislatura, en marzo de 2004, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han arrestado a más de 100 personas por su presunta relación con actos de kale borroka en el País Vasco y Navarra. A estas detenciones hay que añadir las llevadas a cabo por la policía autonómica vasca, como la llevada a cabo el pasado mes de septiembre en la localidad alavesa de Llodio con el arresto de Oier Amorrotu, 29 años.
El juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska ordenó prisión incondicional imputándole un delito de "estragos terroristas en grado de tentativa". La identificación se realizó mediante pruebas de ADN.
El 26 de julio de 2007, la Ertzainzta detuvo en Vitoria a Joseba Mikel Otxoa, de 23 años, supuestamente implicado en actos de kale borroka. Al detenido se le imputan diversos ataques a bienes materiales, alguno de los cuales fue realizado con artefactos mixtos de mayor potencia que los habituales cócteles incendiarios. La Ertzaintza consiguió muestras de ADN de Otxoa tras dos ataques a entidades bancarias llevados a cabo este año en Vitoria en los que participó el detenido, lo que les permitió averiguar su identidad.
El 17 de julio de 2007, Alberto Gómez González, de 25 años, fue detenido por la Ertzaintza en Barakaldo por su presunta participación en varios actos de kale borroka, concretamente, un ataque a dependencias policiales, en 2004, y en la quema de dos cajeros en 2001. Gómez González ingresó en la cárcel de Soto del Real en Madrid por orden del juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, en funciones de guardia.