PAMPLONA, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz, afirmó hoy, tras conocerse que el juzgado ha obligado al Ayuntamiento de Villava a retirar la ikurriña que colocó en un mástil en las inmediaciones de la casa consistorial, que las resoluciones de los tribunales de justicia hay que respetarlas.
Según expuso en declaraciones a los medios de comunicación, los tribunales "han interpretado la ley en la letra y en el espíritu". "No se puede llevar a cabo a través de un fraude de ley un incumplimiento de la misma como pretendía el Ayuntamiento de Villava", indicó Sanz.
A su juicio, no se puede representar el Ayuntamiento de una localidad navarra con la bandera de otra comunidad autónoma. "La ikurriña, a ver si se entera toda la gente no sólo de Navarra sino de España, es la bandera de la CAV", dijo, y aclaró que no tiene "ninguna animadversión a las banderas de otras comunidades".
El presidente señaló que quienes pretenden hacer ver que la ikurriña es la bandera de Navarra "están confundiendo a la opinión pública" y "están confundiendo sus sentimientos personales con la realidad institucional del Estado de las Autonomías".
Manifestó Miguel Sanz que la bandera de Navarra es "la roja con el escudo de las cadenas y la esmeralda de Miramamolín" mientras que la ikurriña "es la bandera de la Comunidad Autónoma Vasca". "Se puede decir más fuerte pero no más claro", sentenció.
Preguntado si esta resolución puede servir de precedente para otras poblaciones que anunciaron su intención de imitar al Ayuntamiento de Villava, el jefe del Ejecutivo manifestó que es su obligación y deber "perseguir el incumplimiento de la ley" y que, por tanto, "cualquier hecho delictivo lo perseguiremos y lo denunciaremos".
