- Les acusa de desafiar la ilegalización de Batasuna y dejares en libertad sería una "patente de corso" para continuar delinquiendo
MADRID, 7 Feb. (OTR/PRESS) -
El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ordenó hoy prisión provisional para Pernando Barrena y Patxi Urrutia, los dirigentes de la ilegal Batasuna detenidos el pasado lunes. Ambos estaban en libertad bajo fianza y el magistrado les imputa reiteración delictiva al considerar que con sus actuaciones han venido desafiado la ilegalización de Batasuna y, por tanto, dejares en libertad supondría una suerte "patente de corso" para continuar delinquiendo. Barrena y Urruitia, que se negaron a declarar ante Garzón, estuvieron representados por la abogada de Batasuna Jone Goirezalaia, que justificó las actuaciones de sus imputados apelando al libre ejercicio de sus derechos civiles y políticos.
'Todos a la cárcel'. Como el film de Luis García Berlanga esta parece ser la consigna, y más en este tiempo de elecciones, a seguir con Batasuna que ve como otros dos de sus dirigentes, de los pocos que quedaban en libertad, acaban entre rejas. Barrena y Urrutia se presentaron ante Garzón poco antes de las diez de la mañana acompañados de la abogada de Batasuna y, al negarse ambos a declarar, sus comparecencias duraron menos de media hora.
Tras las comparecencias el magistrado decretó para ambos prisión provisional e incondicional, tal y como pedía la Fiscalía, por los delitos de integración en organización terrorista y reiteración delictiva. En su auto Garzón señala que con su actividad, tanto Urrutia como Barrena --que tras las detenciones de destacados dirigentes de Batasuna como Arnaldo Otegi, Joseba Permach, Juan José Petrikorena o Rufino Etxeberría venía ejerciendo de líder de la formación ilegalizada-- estaban desafiando la ilegalización y las resoluciones judiciales que se desprenden de la misma.
Una realidad ante la que no se puede permanecer "inerte" ya que al hacerlo, "se les otorgaría una especie de patente de corso para continuar delinquiendo". Además, Garzón apunta que actúa cuando ha dispuesto "de los indicios racionales suficientes en los que apoyar su decisión"
Así, para probar estas imputaciones la resolución del juez recoge 31 actos entre el 6 de octubre de 2007, cuando fue detenida la cúpula de Batasuna, y 2 de enero de 2008 en los que han participado tanto Barrena como Urrutia "demostrando una contumaz rebeldía ante las resoluciones judiciales", el último de ellos, el celebrado el pasado sábado en el hotel Tres Reyes de Pamplona en el que aseguraron que la izquierda abertzale estaría presente en las próximas elecciones del 9-M y tras el que fueron detenidos ambos dirigentes.
NO TODO ES ETA
En las 33 páginas de su auto el juez Garzón también quiere dejar clara una idea: "la izquierda abertzale no es ETA", pero matiza la "vocación fagocitadora y depredadora" que emplea la banda terrorista a través de la ilegalizada Batasuna para apropiarse de ese espacio político. El magistrado subraya la "complejidad de todo el entramado terrorista liderado por ETA" que, apunta, "en ningún caso puede equipararse a Batasuna", si bien acto seguido deja también claro que esta formación "ha procurado y procura instrumentalizar y aprovechar el espacio político que supone para instalarse en él y absorber a los denominada izquierda abertzale, anulando así cualquier opción de discrepancia o independencia".
En este sentido, Garzón constata como probado que la voluntad de las personas que componen este entramado "no es la de acabar con la violencia terrorista", sino la de "coadyuvar renovadamente a la consecución de los fines de la organización terrorista ETA" y además, "sin que se atisbe la mínima intención de separarse de esa línea".
19 DIRIGENTES EN PRISIÓN
Con la encarcelación de Barrena y Urrutia, son ya 19 los miembros de la Mesa Nacional que están en prisión. Barrena venía ejerciendo el papel de portavoz y líder en la práctica de Batasuna desde que el pasado 4 de octubre la Policía Nacional detuviera en Segura (Guipúzcoa) a 23 miembros de la Mesa Nacional. Entre los detenidos estaban destacados dirigentes de la formación ilegalizada como Joseba Permach, Juan José Petrikorena, Rufino Etxeberría o Imanol Iparraguirre.
Detenciones a las que hay que sumar la de Arnaldo Otegi, que ingresó en prisión el 8 de junio después de que el Tribunal Supremo confirmara una condena de 15 meses por enaltecimiento del terrorismo durante un acto de homenaje a un etarra, y la de Joseba Álvarez, que fue encarcelado el 5 de octubre por reincidir en el delito de pertenencia a organización terrorista e inducir a actos de terrorismo callejero en una manifestación convocada por Askatasuna el 11 de septiembre en San Sebastián.
Además, tras la operación de Segura, el pasado 15 de octubre fue detenido el responsable de Institucional de Batasuna, Asier Imaz, que ingresó en prisión por orden de Garzón el día 18. La última detenida fue la responsable de Cultura y Deporte Marije Fullaondo, detenida el pasado 18 de diciembre.