- Uribe supedita a la apertura de un proceso de paz estudiar la retirada a los guerrileros la condición de terroristas
BOGOTÁ/CIUDAD DE GUATEMALA, 15 Ene. (OTR/PRESS) -
La ex parlamentaria Consuelo González, retenida por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) hasta la pasada semana, regresó por fin a Bogotá. A su vuelta, entregó pruebas de vida de ocho rehenes de la guerrilla a sus familiares, a la espera de una "posibilidad de libertad". Pero en el ruedo político, las discrepancias continúan entre el presidente venezolano, Hugo Chávez, y su homólogo colombiano, Álvaro Uribe, quien precisó que concederá a las FARC sólo los beneficios "contemplados en la Constitución" y siempre y cuando exista un proceso de paz, en alusión a la petición de Chávez de retirar la condición de terroristas a los miembros de esta guerrilla.
González llegó a Colombia, además de emocionada, con una intención clara: "Traigo pruebas de supervivencia de los compañeros de campamento, son ocho pruebas de ocho personas que siguen esperando una posibilidad de libertad, un acuerdo entre el Gobierno y las FARC". Así, entregó a los familiares fotografías y cartas de los cautivos, como la del coronel Luis Mendieta, en poder de las FARC desde 1998. En esta misiva, relata su mermada condición de salud y alude a varios secuestrados, entre ellos Ingrid Betancourt, según informaciones de medios locales recogidas por Otr/press. "No es el dolor físico el que me detiene, ni las cadenas en mi cuello lo que me atormenta, sino la agonía mental, la maldad del malo y la indiferencia del bueno", lamentó.
Los familiares congregados en el aeropuerto militar de Bogotá para recibir los documentos lanzaron un llamamiento al jefe de la guerrilla, 'Manuel Marulanda', a quien reclaman la retirada de las cadenas para las personas retenidas. Por ello, la presidenta de la Asociación Colombiana de Familiares de Miembros de la Fuerza Pública Retenidos por Grupos Guerrilleros (Asfamipaz) pidió "con respeto, con dignidad, quiten las cadenas a los secuestrados, que ya son suficientes los diez años que ellos llevan pudriéndose en las selvas de Colombia".
Además, la liberada junto a Clara Rojas dijo traer un mensaje de amor de las personas que quedaron cautivas, "un mensaje de esperanza y fe para todos los colombianos, que nos permitirá convocar a todas las fuerzas del país para que diseñemos una estrategia conjunta, con los países amigos de este proceso". "Vamos a realizar un plan importante buscando la liberación del resto de los secuestrados en Colombia, la acción conjunta del presidente Álvaro Uribe y del presidente Hugo Chávez va a ser altamente positiva, vamos a sumarnos conjuntamente con los colombianos a un trabajo permanente", agregó González, reiterando su agradecimiento al dirigente de Caracas.
COINCIDENCIA EN GUATEMALA
Uribe y Chávez coincidieron en la toma de posesión del presidente de Guatemala, Alvaro Colom, a cuya ceremonia asistieron ambos dirigentes con la separación de cinco presidentes entre sus asientos. Desde este país, Uribe respondió a Chávez, particularmente a su petición de retirada de la condición de terroristas para los miembros de las FARC.
"En el momento en que las FARC hagan demostraciones de buena fe, que quieran negociar la paz, el Gobierno está dispuesto a concederles todos los beneficios dentro de la Constitución, a facilitar ese proceso de paz", explicó. A juicio del mandatario de Bogotá, "en el momento en que avance la paz con las FARC, el Gobierno de Colombia sería el primero que dejaría de llamarlo terrorista y el primero que le pediría al mundo que como contribución a la paz no se les llame más terroristas".
Sin embargo, ni la Unión Europea, ni Estados Unidos, ni el Ejecutivo colombiano se muestran por la labor de rebajar la consideración de las FARC. Y es que, según Uribe, "los grupos violentos de Colombia son terroristas porque reclutan y maltratan a menores, atentan contra mujeres embarazadas y ancianos, lanzan bombas contra la población civil y trafican con droga".
Entretanto, Chávez insiste y desde Ciudad de Guatemala hizo hincapié en que se seguirá "trabajando por la liberación" de las decenas de rehenes que permanecen en la selva colombiana, según la 'Agencia Bolivariana de Noticias'. "Ese conflicto no tiene salida militar, se van a matar cien años más, busquemos con creatividad el camino a la paz", agregó, repitiendo que el apelativo de terroristas parte de Estados Unidos y su presión a la comunidad internacional tras los atentados contra las Torres Gemelas.