- El empate técnico en los sondeos entre Clinton y Obama augura que la contienda podría no quedar decidida mañana
WASHINGTON, 4 Feb. (OTR/PRESS) -
Por fin ha llegado. Desde que arrancasen las primarias en Estados Unidos para elegir a los candidatos de los partidos Republicano y Demócrata, el 'supermartes' estaba en la mente de los políticos por lo determinante de la cita, cuando coinciden más de una veintena de estados votando a la vez. Pero si bien entre los republicanos John McCain parte en los sondeos con una ventaja clara que le confirma como favorito, ni Barack Obama ni Hillary Clinton, demócratas, cuentan con los mismos buenos augurios. De hecho, y dada la proporcionalidad del reparto, podría darse el caso de que ninguno de los dos lograse matemáticamente la mayoría necesaria para convertirse en aspirante a la Casa Blanca y, en consecuencia, habría que esperar a posteriores primarias.
Ni Obama ni Clinton han despuntado en esta carrera, primer paso para alcanzar la Presidencia. La senadora de Nueva York ganó cuatro de las citas anteriores, por dos de su homólogo de Illinois. Sin embargo, las encuestas de opinión publicadas estos días por los medios norteamericanos y recogidas por otr/press no muestran grandes diferencias entre ambos candidatos, descartando los estados en los que ambos dirigentes juegan en casa y en los cuales los porcentajes podrían rondar el 54-55%.
Así, y pese a una ligera ventaja global de Clinton, existe un empate virtual que podría resolverse en futuros comicios. Un estudio a nivel nacional del 'Washington Post' y la 'ABC' da cuatro reducidos puntos de ventaja a la ex primera dama frente al político afroamericano. Ante este panorama, parece improbable que los dos supervivientes demócratas, una vez retirado John Edwards, logren los 2.025 delegados necesarios para asegurar su nominación en la convención de noviembre, ya que el reparto es proporcional y no mayoritario. Además, no se premia en la misma medida una victoria en California o Nueva York que en los que el peso poblacional es considerablemente menor. En California, por ejemplo, se reparten 370 nombres.
Como respaldo de última hora, y para completar el dado por el grueso del clan Keneddy, Obama recibió el apoyo de la primera dama de California, Maria Shriver, pese a que su marido, Arnold Schwarzenegger, se posicionó a favor de McCain. "Considero que si Obama fuera un Estado sería el de California", aseguró Shriver durante un acto electoral del precandidato en Los Ángeles, porque "es abierto, inteligente, independiente, innovador, es un soñador, un líder".
MCCAIN, CON VENTAJA
Entre los republicanos, en cambio, el favorito sigue siendo McCain. Las últimas encuestas sitúan el apoyo que puede lograr el 'supermartes' en torno al 48%, prácticamente el doble que su más directo competidor, Mitt Romney, a quien le sigue pesando la supuesta fuga de votos conservadores 'robados' por el tercero en litigio, Mike Huckabee, que no tira la toalla pero cuyas posibilidades son reducidas aparentemente.
No obstante, McCain opta por la cautela, pese a haber recibido el apoyo público del ex alcalde de Nueva York Rudolph Giuliani y el gobernador de California, no dio nada "por seguro" en unas recientes declaraciones recogidas por la 'CNN'. Entretanto, Romney apuesta por "no permitir" la victoria de McCain, mientras Huckabee habla de "conseguir bastantes delegados y hacerlo bien".