- McCain gana en Virginia, Maryland y el Distrito de Columbia y prácticamente se asegura la nominación republicana
WASHINGTON, 13 Feb. (OTR/PRESS) -
Las victorias de Barack Obama en las primarias demócratas en Estados Unidos han pasado a ser la tónica dominante, después de que no haya cedido ni un sólo escenario tras el 'supermartes'. De esta forma, el candidato del cambio y del 'Yes, we can' ('Sí, se puede', para los millones de electores hispanos) lleva ya ocho triunfos consecutivos, después de ganar en Virginia, Maryland y en la Ciudad de Washington, que le permiten ampliar su ventaja sobre su directa rival Hillary Clinton. Por otra parte, en el Partido Republicano, John McCain logró también la última triada y tiene ya a tiro la nominación final.
Obama sumó un nuevo impulso en sus aspiraciones de llegar a la Casa Blanca, en detrimento de la ex primera dama, para quien el cambio de estrategia y personal de su campaña no ha surtido el efecto deseado. El senador por Illinois refuerza así su liderazgo en la carrera demócrata, aún apretada, gracias a sus victorias en Virginia, Maryland y el Distrito de Columbia. "Esta noche estamos en nuestro camino. Pero sabemos lo mucho que nos falta por avanzar", afirmó Obama ante sus seguidores en Madison, Wisconsin, donde se celebrará la próxima votación.
En Washington DC, logró su mayor margen hasta la fecha, un 75% de apoyo frente al 24% obtenido por la senadora por Nueva York. No obstante, según datos de 'The Washington Post' recogidos por otr/press, la diferencia en otros lugares fue inferior, ya que en Virginia logró el 64% de los votos y en Maryland, donde el mal tiempo modificó los horarios de apertura, consiguió el 60% del total. "Sabemos que en este momento los cínicos ya no pueden decir que nuestras esperanzas son falsas", señaló Obama.
A Hillary Clinton le queda esperar a las siguientes contiendas, aunque obvia las primarias de Wisconsin y Hawai y está apostando por los estados de Texas y Ohio. "Vamos a arrasar en Texas en las próximas tres semanas", auguró la senadora. Sin embargo, y aunque Obama cuenta según los medios estadounidenses con una ventaja en número de delegados algo superior a medio centenar, parece difícil que alguno de los dos precandidatos pueda alcanzar el hito de los 2.025 nombres necesarios, por lo que ya se empieza a escuchar en campaña la opción de los denominados 'superdelegados', libres para apoyar a quien quieran en la convención, y ante quienes Clinton parece que goza de más simpatías.
NADIE TOSE A MCCAIN
Pese a algunas victorias del ex gobernador de Arkansas Mike Huckabee en la última semana, McCain sigue imparable y será con prácticamente toda probabilidad la opción republicana en las próximas elecciones presidenciales. Tras la victoria de Washington, McCain logró la triada del Potomac, como se conoce a las tres últimas citas electorales celebradas por el paso común de un mismo río.
Así, el favorito obtuvo el 68% de los votos en Columbia, frente al 17% de Huckabee, quien consiguió mejores resultados en Maryland, donde logró el 31% del total de apoyo, insuficiente aun así para alcanzar el 54% de McCain. En Virginia, la diferencia entre ambos líderes políticos fue tan sólo de nueve puntos, puesto que McCain logró un escaso 50%.
Huckabee no se rinde, y por eso sigue manteniendo que "existe una sensación real en el Partido Republicano, un deseo de tener una opción, un deseo de asegurar a los votantes que quieren a un conservador sólido". "Estamos decepcionados, pero no eliminados", recalcó ante sus simpatizantes. No obstante, McCain ya comienza a ejercer de nominado final, y fantasea en sus mítines acerca de un posible enfrentamiento con Obama, mientras comienza a dirigir sus mensajes no sólo "a los que están de acuerdo" con él", sino "a toda la gente".