- Los próximos cuatro años "serán para construir el futuro y no para debatir temas ya pasados", advierte el presidente del Gobierno
MADRID, 14 Ene. (OTR/PRESS) -
La legislatura fue hoy formalmente cerrada y las elecciones generales oficialmente convocadas. En un Consejo de Ministros extraordinario el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y su equipo firmaron la disolución de las Cortes Generales y la convocatoria de los próximos comicios para el próximo 9 de marzo, tal y como estaba previsto. En una rueda de prensa posterior, el jefe del Ejecutivo dijo estar "más motivado que nunca" para afrontar la cita con las urnas y aseguró que los próximos cuatro años "serán decisivos si queremos progresar aumentando la libertad y las políticas sociales". "Serán años para construir el futuro y no para debatir temas ya pasados", advirtió.
Tras presidir la sesión extraordinaria del Consejo de Ministros y despachar con el Rey, Zapatero compareció ante los periodistas para informar de la decisión y hacer, de nuevo, un balance de la VII Legislatura de la democracia, que definió como un periodo de "reformas, cambios y de progreso en general para el país". Pero también una legislatura de "estabilidad y normalidad y responsabilidad democrática", aseguró, apoyándose en que se ha completado la legislatura, se han aprobado cuatro Presupuestos Generales del Estado y 170 iniciativas legislativas.
A su juicio, aunque ha sido calificada como una legislatura "dura y difícil", para él ha sido "un honor" ser el presidente del Gobierno y añadió que de cara a las próximas elecciones generales se siente "algo más que fuerte, más motivado que nunca". De hecho, Zapatero consideró que así lo está también la sociedad española, que "nunca más va a renunciar al derecho a tener éxito". En la misma línea, el jefe del Ejecutivo afirmó que ha liderado un Gobierno que ha gozado de "estabilidad" para llevar a cabo su programa y anunció que su intención es pedir la confianza de los electores para "una mayoría más amplia".
En este sentido, Zapatero no quiso valorar los últimos sondeos electorales y explicó que en precampaña y campaña se concentrará en explicar sus "ideas, objetivos y propuestas" para los próximos cuatro años, que "serán decisivos si queremos progresar aumentando la libertad y las políticas sociales". "Serán años para construir el futuro y no para debatir temas ya pasados", proclamó, antes de remarcar que "son los ciudadanos los que tienen la palabra y en estos momentos tienen más que nunca el derecho a escucharnos, a debatir serenamente sobre ideas y propuestas; después del 9 de marzo ya valoraré todas las encuestas".
LOS HITOS DEL GOBIERNO ZAPATERO
"Quiero, en este momento particularmente solemne en democracia, dirigirme a todos los españoles para animarles a que participen activamente en el proceso electoral que ahora se inicia y pedirles a todos ellos que el próximo día 9 de marzo depositen su voto y ejerzan su derecho a elegir su gobierno para los próximos cuatro años", declaró el jefe del Ejecutivo, que dijo no haber realizado "ninguna oferta genérica ni concreta" a alguna fuerza nacionalista, como CiU o PNV de cara a las próximas elecciones. Eso sí, incidió en que, cualquier gobierno, con estas dos fuerzas debería tener una relación de diálogo "abierta, si es posible constructiva".
Zapatero dedicó buena parte de su intervención a destacar la gestión económica de su equipo afirmando que "la acción del Gobierno ha estado destinado a asegurar que en cualquier circunstancia habrá recursos suficientes" para garantizar el gasto social. El superávit presupuestario, el incremento del fondo de reserva de la Seguridad Social hasta 52.000 millones de euros en 2008, la creación de tres millones de empleos, las medidas sociales o las tomadas contra la violencia de genero y en pro de las seguridad vial fueron destacadas de nuevo por el presidente del Gobierno como hitos de su mandato.
A ello añadió las medidas tomadas para acabar con "discriminaciones odiosas", como la ley que permite el matrimonio homosexual y subrayó que ha trabajado "para que todos los ciudadanos sean respetados" independientemente de su origen, de sus creencias y sus convicciones. En la misma línea, señaló que ha dirigido el Gobierno de España "con respeto" y que respeto ha sido también lo que España ha ofrecido y ha pedido también a otros países, en una "política exterior autónoma", que se inició con la retirada de las tropas de Irak un día después de tomar posesión el Gobierno.