Actualizado 25/01/2008 21:27

Crónica Euskadi.- Rubalcaba califica de disparate "electoralista" y que "no ayuda" la manifestación 'pro Atutxa'

- El Gobierno vasco replica que solo cumple con su "obligación" de defender las Instituciones vascas

MADRID/BILBAO, 25 Ene. (OTR/PRESS) -

Al Gobierno vasco siguen lloviéndole críticas por asistir la manifestación que el tripartito que forman PNV, EA y EB ha convocado mañana en Bilbao contra la condena del Supremo al ex presidente del Parlamento Vasco Juan María Atutxa y sus compañeros en la mesa de la Cámara autonómica, Kontxi Bilbao y Gorka Knörr, por negarse a disolver el grupo de Sozialista Abertzaleak (SA) tras la ilegalización de Batasuna en 2003. Una marcha en la que el Ejecutivo vasco estará encabezado por el lehendakari, Juan José Ibarretxe, en lo que el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, calificó hoy de disparate "electoralista" que "no ayuda" nada a fomentar la convivencia. Pero el Gobierno de Ibarretxe hace odios sordos a todas las críticas y afirma que saliendo a la calle el sábado solo cumple con su "obligación" de defender las Instituciones vascas.

Rubalcaba, al ser interrogado sobre la manifestación que mañana por la tarde recorrerá la calles del Bilbao bajo el lema 'En defensa de nuestras instituciones' calificó la marcha, y su justificación por parte del tripartito vasco, de disparate "electoralista" que además no ayuda en nada a la normalización y a fomentar la convivencia en Euskadi.

Además, el ministro se refirió también a las declaraciones u portavoz, Miren Azkarate, diga que el PSOE quiere que España sea "una, grande y libre". "Eso no se lo cree nadie", espetó Rubalcaba que en todo caso quiso dejar claro que no sería él quien criticase el derecho de manifestación pero matizó que los gobiernos, cuando se manifiestan, "tienen que medir mucho lo que dicen".

El líder de los socialistas vascos, Patxi López, también cargo duramente contra el Gobierno de Ibarretxe al que acusó de "salir de manera tremendista a poner en cuestión al propio Estado del que forma parte, demostrando una gran irresponsabilidad". Y mientras tanto, la presidenta del PP del País Vasco, María San Gil, ha pasado de las palabras a los hechos y ha presentado una interpelación en el Parlamento vasco en la que pide al lehendakari que, ante su "irresponsable" apoyo a la manifestación, explique "los motivos por los que el Ejecutivo rechaza una resolución judicial tras otra y pretende la impunidad de los acusados".

Pero las críticas al Gobierno vasco no le llegaron solo desde el mundo político, la judicatura tampoco está muy contenta con la marcha del sábado contra la sentencia del Supremo. El portavoz del Consejo General del Poder Judicial, Enrique López, realizó una llamada a "la responsabilidad y a la racionalidad" a todos los miembros del Ejecutivo vasco que acudan a la manifestación del sábado.

Y es que si se rebasan los límites de la crítica razonable a una decisión judicial, algo que entienden y asumen, se entraría "en otro escenario" que, advirtió, tendría que ser analizado por el propio CGPJ. De hecho, varios de los vocales ya han transmitido su interés porque la convocatoria de manifestación sea "forzosamente analizada" en alguno de los órganos colegiados del CGPJ ya convocados para la semana que viene, como puede ser la Comisión Permanente, que se reunirá el martes, o en el propio Pleno, convocado para el miércoles.

DEFENSA DE LA DIGNIDAD DEL PARLAMENTO

Convocatoria que se hizo formalmente hoy y en la que el líder del PNV, Iñigo Urkullu, apeló a la ciudadanía a movilizarse para que la voluntad popular no esté al "antojo" de quienes "se creen interpretes únicos de la legalidad, retorciéndola a su antojo político, desde la impunidad de un poder corporativo y al borde de cualquier control democrático".

En una comparecencia en la que estuvo acompañado en el presidente de EA, Unai Ziarreta, y el coordinador general de EB, Javier Madrazo, Urkullu defienden la "dignidad" de Atutxa, Knörr y Bilbao, pero también del resto de parlamentarios, por lo que indicó que también defienden "la dignidad parlamentaria de Patxi López, de María San Gil y de todo los electos".

Idénticos argumentos fue los que dio el consejero de Justicia, Empleo y Seguridad Social del Gobierno vasco, Joseba Azkarraga, para justificar el apoyo y la presencia del Ejecutivo de Vitoria, con Ibarretxe en la cabeza, en la manifestación. Azkarraga señaló que es "una obligación" estar en una marcha cuando "está en juego la separación de poderes" y la capacidad del Parlamento vasco "para tomar sus propias decisiones".

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