- El ex presidente del Gobierno dice que estamos "en la peor crisis" que ha conocido y que todavía durará "un cierto tiempo"
MADRID, 6 Nov. (OTR/PRESS) -
El ex presidente del Gobierno Felipe González censuró hoy la actitud del PP ante la crisis económica, criticando que no haya hecho "ninguna aportación seria". "Es más. Le he oído decir algo tan demagógico como que ustedes se ocupan de apoyar a los bancos, pero no a las familias. Que lo diga el PP es que a uno se le cae la cara de vergüenza", remachó el antiguo jefe de Gobierno socialista, que explicó además que la crisis financiera y económica actual es "la peor" que él ha conocido y que todavía "vamos a estar durante un cierto tiempo" en ella, "depende de cómo reaccionemos".
En una entrevista con TVE recogida por otr/press, Felipe González explica que respecto a la crisis "no hay que hablar de dos sentidos", pues "cuando hay una operación de inyectarle liquidez al sistema financiero no es una ayuda cuya finalidad última sean los bancos". "Los bancos son un instrumento absolutamente imprescindible para que funcione la economía productiva", sostiene el ex presidente del Gobierno, que subraya que la "inyección de liquidez a los bancos se hace para fortalecer a un sistema financiero que sirva a la economía productiva".
"Creo que la finalidad, para que la gente no se confunda, de darle solidez al tema financiero inyectándole liquidez no es que se favorezcan los bancos, sino que se favorezca el conjunto del país y de la economía productiva", insiste Felipe González, que asegura que "la crisis es la peor" que ha conocido. "A nivel mundial y creo que la peor en España, y yo conocí una muy dura", afirma el ex presidente del Gobierno, que define la crisis que le tocó vivir como "una V" en la que primero hay una caída del mercado, que el sitúa en el 93, y poco después se remonta de nuevo, citando el año 94.
"La crisis es muy dura, depende de cómo reaccionemos este año, el que viene o el siguiente, la forma de la figura será de V, pero un poco menos rápida que la otra, o de U, y vamos a estar durante un cierto tiempo en la crisis", añade Felipe González, que advierte de que "el año que viene va a ser muy duro para la economía española" y "para la economía europea". En este sentido, espeta que se produzca un 'rebote' en la economía de Estados Unidos "porque si se arreglan allí las cosas algo pueden ayudar" a que en la UE y en España la situación mejore.
OBAMA "MUY INTELIGENTE"
En cuanto a la postura del PP respecto a la crisis, González es claro: "Debo decir que no he oído ninguna aportación seria por parte de los dirigentes populares". "Es más. Les he oído decir algo tan demagógico como que ustedes se ocupan de apoyar a los bancos, pero no a las familias. Que lo diga el PP es que a uno se le cae la cara de vergüenza", sentencia el ex presidente, que cree que el PP está "alimentando la confusión" entre los ciudadanos e insiste en que "si el sistema financiero no tiene la capacidad de dar créditos a las empresas el paro aumentará, las familias lo pasarán peor, las hipotecas serán más difíciles de pagar".
"El fallo que hemos tenido del modelo de crecimiento de estos años es que la economía financiera ha dejado de servir a la economía real para servirse a sí misma", asegura González, que también se refiere en la entrevista al nuevo presidente electo de Estados Unidos, el demócrata Barack Obama. Sobre él, el ex jefe del Ejecutivo español consider muy "inteligente" que haya apelado "al espíritu de nueva frontera, a la ambición americana en un momento de depresión psicológica además de recesión económica". "Por otro lado ha dado una lección de pragmatismo y de realismo fantástica, porque sabe que ha levantado expectativas y ahora tiene que administrarlas", añade.
En esta línea, González cree que Obama "va a hacer un planteamiento de contar con nosotros". En este sentido, considera que "la relación con los EE.UU. no puede ni debe seguir siendo un problema hispano-español, un problema de política interior" o "que se use como se ha usado en los últimos diez años, o doce, como un problema de política interior". "Es la relación con una gran, tiene que ser una relación lo mejor posible, lo más respetuosa posible, pero no puede ser el pasto de una pelea interior a ver quién es pro gringo, anti gringo", sostiene el ex presidente del Gobierno.