- Los acusados se indignan cuando el fiscal confunde el Partido Comunista de España Reconstituido con el Partido Revolucionario
MADRID, 29 May. (OTR/PRESS) -
Tres supuesto miembros de los Grupos Antifascistas Primero de Octubre (GRAPO) provocaron hoy su expulsión de la Sección Tercera de la Audiencia Nacional, presidida por el juez Alfonso Guevara, después de que desafiaran al tribunal con gritos, risas y un desplante nada más comenzar el juicio. Aún así, María Aranzazu, Juan García Martín y Carmen Cayetano, exigieron su parte de respeto al fiscal vicente González Mota, que se refirió a ellos como miembros del "Partido Revolucionario", a lo que le espetaron: "¡Partido Comunista de España Reconstituido, apréndetelo!".
La Fiscalía solicita 16 años y 6 meses de prisión para García Martín, alias 'Rodrigo' y Carmen Cayetano, alias 'Talía', por un delito de pertenencia a organización terrorista en grado de dirigentes y falsificación continuada de documentos oficiales, y 12 años y tres meses para Aránzazu Díaz, alias 'Aila'. Los agentes de la Guardia Civil que registraron el piso en el que vivían los tres 'grapos' se encontraron 8 DNIs con las fotografías de los tres procesados y distintas identidades, así como documentación en la que figuraba información de entidades bancarias para cometer atracos.
Por su parte, el abogado de la defensa solicitó la libre absolución de los tres acusados argumentando que en caso de que sus clientes fuesen efectivamente integrantes de la banda habrían dejado un rastro de acciones que no se han podido acreditar. El juicio quedó visto para sentencia después de que los acusados renunciasen a hacer uso se derecho a la última palabra. "Es curioso, cuando les doy la palabra no hablan y cuando no, no dejan de interrumpir", remachó el juez Guevara después de una sesión movida a cuenta del comportamiento de los tres acusados.
Nada más ser introducidos en la pecera blindada los tres presuntos 'grapos' se dieron la vuelta dando la espalda al tribunal, por lo que Guevara instó a los agentes de la sala a que redujesen a los acusados de su protesta y les colocasen correctamente. Hasta cinco agentes fueron necesarios para sentar a los tres acusados, quienes, tras un breve forcejeo con las autoridades, terminaron situándose de cara al tribunal, momento en el que comenzaron con los gritos: "Así es la Justicia en este país", exclamó Aranzazu Díaz.
DESENCHUFADOS
Cuando el fiscal comenzó con el turno de preguntas, ni García, ni Díaz, ni Cayetano contestaron a ninguna de las cuestiones planteadas por el Ministerio Público. En cambio, se limitaron a denunciar las supuestas torturas sufridas por parte de la Guardia Civil. Ya insonorizados para no molestar, los acusados comenzaron a hablar entre ellos y a comentar entre risas. "Nos han desenchufado", bromeaban. "Yo pertenezco al PCE(r) y eso es lo que consta en mis declaraciones a la Guardia Civil, entraron en nuestra sede y nos quitaron los ordenadores y una fotocopiadora, no teníamos armas", gritó Carmen Cayetano antes de ser insonorizada.
A los acusados les puso especialmente nervioso que el fiscal no supiese el nombre del partido al que su presuntamente pertenecían y al que calificó en varias ocasiones como "el Partido Revolucionario". "¡Partido Comunista de España (reconstituido), apréndetelo que son muchos años ya!", espetó Aránzazu Díaz. En el momento en el que eran desalojados y cuando se habilitaba la sala para las declaraciones de los testigos protegidos, los acusados también a gritos, tuvieron palabras para los agentes de Guardia Civil que iban a comparecer a continuación. "Si eso protegerlos bien por si acaso, al que me torturó sí que tengo ganas de conocerle yo", dijo Díaz, quien se encontraba en la clandestinidad desde diciembre de 2002.