Crónica Suceso.- Una mujer denuncia que cuatro menores abusaron sexualmente de su hijo de 10 años en Almería

- La Fiscalía de Menores archiva la causa porque el único agresor denunciado no tiene la edad mínima para ser condenado

ALMERÍA, 27 Mar. (OTR/PRESS) -

Una vecina del municipio almeriense de Adra denunció la violación de su hijo de 10 años por parte de cuatro compañeros de colegio, de entre 13 y 15 años. Al parecer, el joven fue vejado a practicar felaciones, mientras era grabado con un móvil. Sin embargo, la Fiscalía de Menores ha ordenado el archivo de la causa abierta contra uno de los agresores confesos al que la denuncia interpuesta ante la Guardia Civil señalaba como autor de, al menos, una penetración, debido a que tiene 13 años y no llega al mínimo de 14, edad a la que se le podría imputa el delito.

La mujer, Teresa S.B. relató que el pasado día 21 de marzo recibió la llamada de la directora del CEIP 'Nueva Andalucía' en la que alertaba de que su hijo había sido objeto de "tocamientos y abusos" que, posteriormente, fueron confirmado por facultativos del Hospital de Poniente de El Ejido, tras una primera exploración efectuada por el pediatra del centro. Así, según el parte médico, la víctima presentaba numerosas contusiones en la espalda además de desgarro anal.

Al día siguiente, según precisó la mujer, denunció los hechos en la Guardia Civil, que remitió la acusación, mediante un escrito, a un menor de 13 años por delitos de amenazas, coacciones, agresión sexual y lesiones. Sin embargo, Teresa S.B. sostiene que la agresión a su hijo fue realizada por cuatro jóvenes, uno de ellos de 15 años y, por tanto, con responsabilidad penal. Según la mujer, este chico fue el encargado de grabar lo ocurrido y el que obligó a su hijo a realizar hasta tres felaciones mientras otro de los implicados le sujetaba para evitar el forcejeo y un tercero, el chico de 13 años, "se limitaba a mirar lo que hacía".

Precisamente fue este último el que, movido por los remordimiento, reveló a la directora del CEIP lo sucedido, aunque, según los profesores, ya sospechaban algo pues el agredido había mostrado en las últimas semanas "signos de que algo grave pasaba porque no comía, no dormía y siempre estaba esquivo y ojeroso". Fue la confianza que uno de los agentes de grupo de Especialistas Mujer-Menor de la Benemérita despertó en el niño "que se negaba a hablar" la que permitió conocer como sucedieron los hechos, que se desarrollaron fuera del recinto escolar y en horas no lectivas.

LOS ABUSOS

Al parecer, la víctima fue abordada por los presuntos agresores cuando regresaba como todos los días de clases particulares. Estos habían escondido previamente la bicicleta que usaba para hacer el trayecto desde casa en una cabaña ubicada en un descampado cercano al colegio, a la que le instaron a ir si quería recuperarla. Una vez en el interior, según detalló María Teresa S.B., "le sentaron en un sofá, le obligaron a practicar las felaciones y, después, le amarraron y, tras darle varios palos porque se resistía, uno le penetró analmente mientras le amenazaban con repetir si no robaba dinero para ellos"

El menor, en tratamiento psiquiátrico desde el pasado día 7, y un hermano pequeño no asisten a clase desde que se denunciaron los hechos. "Está todo el día drogado", asegura la madre, "tapado con una manta, y no consiente que abramos las ventanas o puertas de la casa, mientras que su agresor sólo ha sido expulsado del centro durante una semana".

Además, tras la denuncia y la investigación pertinente, la Fiscalía de Menores ordenó el archivo de la causa abierta contra uno de los agresores confesos al que la denuncia interpuesta ante la Guardia Civil señalaba como autor de, al menos, una penetración, debido a que sólo tiene 13 años y no cuenta con la edad mínima de 14 años requerida para imputarle un delito.

Ante esta situación, la Asociación Pro Derechos del Niño y de la Niña, Prodeni, pidió hoy al Sistema de Protección de Menores de la Junta de Andalucía que investigue "en profundidad" las circunstancias en las que se produjo y las razones que motivaron la violación del alumno. El portavoz de la asociación, José Luis Calvo, criticó la "desidia" y la "hipocresía" que demuestran a veces las instituciones, en relación al archivo del caso.