- El otro detenido por encubrir a la agresora queda en libertad sin fianza
BARCELONA, 6 Feb. (OTR/PRESS) -
El juez de Instrucción número 8 de Gavà (Barcelona) decretó hoy prisión provisional por asesinato para la mujer que mató a su novio en un piso de Castelldefels. Mientras tanto, el otro detenido por el caso, Luis Miguel S.R., que encubrió a la autora material de los hechos y no avisó a los Mossos d'Esquadra para comunicar lo ocurrido, quedó en libertad sin fianza, pero deberá comparecer cada 15 días ante el juzgado de Gavà. Los hechos ocurrieron el domingo, cuando la mujer, Debora Cristina D.L., de 29 años y nacionalidad brasileña, presuntamente mató a su novio, Diego M.A., de 43 y nacionalidad española, agrediéndole con un objeto punzante.
La noche del pasado 3 de febrero, los tres implicados se encontraban en el piso de la pareja, en el número 68 del paseo Marítim, en Castelldefels, donde tras una discusión, la mujer agredió mortalmente a su novio. Al parecer, le asestó numerosos golpes y utilizó un objeto punzante, puesto que el cadáver presentaba golpes, cortes y un escroto reventado.
Durante la agresión, Luis Miguel no sólo no hizo nada por ayudar a la víctima, sino que tampoco comunicó los hechos a los Mossos d'Esquadra. Así, sobre las 21 horas, la mujer salió a la calle para buscar ayuda, donde encontró a Gabriel, un vecino al que le pidió que fuera a ver a su pareja y "confirmara si estaba muerto o no". Este acudió "alucinado" a la vivienda, donde encontró el cuerpo del hombre "muerto y lleno de sangre", tras lo que llamó al Servicio de Emergencias Médicas (SEM) y a la Policía.
Según los agentes, el cuerpo estaba tendido en el suelo y con evidentes señales de violencia, por lo que detuvieron tanto a la mujer como al otro implicado en el caso, cuya relación con ella y con la víctima aún no se ha determinado. Hoy, el juzgado de Instrucción número 8 de Gavà, Barcelona, decretó prisión provisional para ella y libertad sin fianza para él, con la obligación de comparecer ante el juzgado cada 15 días.
DISCUSIONES CONSTANTES
Los vecinos de la pareja, que podría haber roto hacía unos días, no se mostraron sorprendidos ante lo ocurrido ya que, según comentaron, temían "algo así" desde hace tiempo debido a que la pareja protagonizaba discusiones "constantes".
De hecho, Gonzalo, el vecino del piso superior, aseguró haber tenido que llamar a la Policía en alguna ocasión debido a "los gritos" de ambos, que se trasladaron a la vivienda hace cinco meses. Sin embargo, reconoció que "nunca" escuchó que se pegasen. "Siempre había mucho jaleo", declaró.
De esta forma, aunque los hechos no han sorprendido en el vecindario, no consta ninguna denuncia interpuesta por ninguno de los dos por violencia.