- Tsvangirai amenaza con suspender las conversaciones con el presidente si no deja de perseguir a la oposición
HARARE, 19 Dic. (OTR/PRESS) -
El presidente de Zimbabwe, Robert Mugabe, aseguró que ningún país africano "es lo suficientemente valiente" para echarle del poder, en una reunión de su partido. Además, Mugabe anunció que había enviado cartas al líder de la oposición, Morgan Tsvangirai, para invitarle a que preste juramento como primer ministro, aunque mostró sus dudas sobre que el líder de la oposición vaya a aceptar. Ante esto, Tsvangirai, dijo que pedirá la suspensión de las conversaciones para compartir el poder si el partido del presidente no deja de perseguir a sus rivales políticos.
"¿Cómo podrían los líderes africanos derribar a Robert Mugabe u organizar un ejército para entrar aquí?", dijo Mugabe, en una reunión del comité central de su partido, la Unión Nacional Africana de Zimbabwe-Frente Patriótico (ZANU-PF), según informaciones del diario estatal 'Herald' recogidas por otr/press. "No conozco a ningún país africano que sea lo suficientemente valiente para ello", añadió. El comentario llegó en medio de una gran presión internacional sobre el líder zimbabwense, cuyos críticos sostienen que su política ha destruido la economía. Entre esos críticos se encontrarían el ministro de Exteriores de Botswana, o el primer ministro de Kenia, que le han pedido que ponga fin a sus 28 años de mandato.
La mayoría de los países africanos rechazan la intervención militar en Zimbabwe. Sudáfrica, que es la potencia regional, ha expresado en reiteradas ocasiones su oposición a dicha idea. Y los países occidentales, que son los que más han insistido en la dimisión de Mugabe, nunca han ido tan lejos como para apoyar abiertamente el uso de la fuerza. Además, muchos dirigentes africanos se resisten a enfrentarse a Mugabe, que sigue siendo visto en muchas partes como un héroe de la liberación de la gran parte del continente. Sin embargo, la última gran crisis económica en la que se encuentra el país, el brote de cólera que asola Zimbabwe, y el poco respeto de Mugabe a los derechos humanos han debilitado la imagen que tiene en África.
CONFLICTO CON TSVANGIRAI
Por otro lado, el presidente de Zimbabwe anunció que había invitado al líder de la oposición, Morgan Tsvangirai, a jurar el cargo de primer ministro en un Gobierno compartido, pero mostró dudas sobre si este aceptaría el cargo. "Le he enviado cartas para que puedan venir y yo les pueda tomar juramento y nombrarles. No hemos llegado a una fase en la que podamos decir con un grado de certidumbre que quiere ser parte de esto", declaró Mugabe.
Por su parte, el propio Tsvangirai amenazó con romper las conversaciones para compartir el poder si el partido del presidente no deja de perseguir a sus rivales políticos. El Movimiento Democrático para el Cambio "no puede seguir sentándose en la misma mesa de negociaciones con un partido que está secuestrando a nuestros miembros y a otros civiles inocentes", afirmó el líder opositor. "Si estos secuestros no cesan inmediatamente, y si todos los secuestrados no son puestos en libertad o acusados en un tribunal antes del 1 de enero de 2009, pediré al Consejo Nacional del MDC que apruebe una resolución para suspender toda negociación y contacto con el ZANU-PF", sentenció.
Por otro lado, las Naciones Unidas informaron que el número de personas fallecidas por el brote de cólera aumentó a 1.123, y que las personas infectadas ya son más de 20.896. Mientras tanto, la inflación en el país no cesa, y los precios se doblan cada día. Por ese motivo, el Banco Central presentó un billete de 10.000 millones de dólares zimbabwenses, que equivale a unos 14 euros en el mercado negro.
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