Crónica Justicia.- PSOE exige al presidente del CGPJ que explique en el Congreso por qué no inhabilitó al juez Tirado

- Zapatero muestra su "discrepancia profunda y seria" con la sanción y anuncia que Gobierno estudiará "todos los caminos legales"

MADRID, 26 Dic. (OTR/PRESS) -

El PSOE quiere que el presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Dívar, explique ante el Congreso la sanción impuesta por este órgano al juez del 'caso Mari Luz', Rafael Tirado, una multa de 1.500 euros por permitir que el presunto asesino de la pequeña estuviera en la calle al no ejecutar una sentencia que pesaba sobre él. El propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, respaldó la comparecencia urgente de Dívar ante el Congreso y expresó públicamente su ya consabida "discrepancia profunda y seria" con la sanción impuesta al juez Tirado. Además, Zapatero anunció que el Ejecutivo está estudiando "todos los caminos legales" ante esta decisión y confirmó que Ministerio de Justicia ya trabaja en una reforma del régimen disciplinario de los jueces.

El Grupo Socialista registró ante la Cámara Baja su petición para que Dívar comparezca con urgencia ante el Congreso y explique la política disciplinaria del Consejo y de inspección de los tribunales. Una petición que llega a raíz de que el pasado martes el Pleno del CGPJ decidiera mantener la sanción de 1.500 euros para el juez Tirado como autor de una "falta grave de desatención" desestimando así la petición de la Fiscalía que, después de que el Gobierno reclamara en repetidas ocasiones una pena más dura para el magistrado que permitió que el presunto asesino de la pequeña Mari Luz estuviera en libertad en el momento de su muerte, recurrió la sanción exigiendo la suspensión del juez por tres años como autor de una falta muy grave.

Una sanción de 1.500 euros con la que el Gobierno "discrepa profunda y abiertamente", según apuntó el propio Zapatero que aseguró que el Gobierno "estudiará todos los caminos legales que puedan existir ante este caso concreto". Así, y además de dar su pleno apoyo al recurso presentado por la Fiscalía, confirmó que el Ministerio de Justicia "trabaja ya" en una reforma del régimen disciplinario de los jueces.

En este punto el presidente del Gobierno señaló que, como cualquier otro órgano constitucional, el CGPJ "es responsable de sus decisiones y dentro de esta responsabilidad está sometido a crítica". Además apuntó que en este caso concreto, con sus críticas a la sanción al juez Tirado, el Ejecutivo canaliza la amplia voluntad de los ciudadanos.

"Quienes representamos la voluntad mayoritaria de los ciudadanos tenemos la responsabilidad de intentar que estas cosas no vuelvan a suceder y por tanto tenemos la obligación de hacer las reformas que sean necesarias", señaló Zapatero que también reveló que habló con el padre de Mari Luz, Juan José Cortés, el mismo día en que se conoció la decisión del CGPJ y le aseguró que su caso "va a tener un efecto positivo para mejorar el funcionamiento de la Administración de Justicia". Además, Zapatero señaló que, lógicamente, respalda totalmente la petición de comparecencia de Dívar ante el Congreso y destacó que es "bueno" que "se explique en la sede de la soberanía".

NO PODRÁ HABLAR DE TIRADO

Para el presidente de la Comisión de Justicia del Congreso y secretario de Libertades Públicas del PSOE, Álvaro Cuesta, el Consejo del Poder Judicial "no ha estado a la altura" en este caso y ha dado "una imagen penosa de debilidad y corporativismo". "El CGPJ ha demostrado ser rehén de la asociaciones judiciales y del corporativismo, y ha olvidado que su legitimidad proviene del Parlamento y de la Constitución", denunció.

Ahora, la petición del PSOE debe ser calificada por la Mesa del Congreso y después será el CGPJ el que decidirá si su presidente acude o no al Parlamento. El antecesor de Dívar, Francisco José Hernando, decidió al final de su mandato negarse a este tipo de comparecencias al entender que el Poder Legislativo no puede controlar al Judicial. Aunque, según anunció la portavoz del CGPJ, Gabriela Bravo, Dívar sí comparecerá ante la Cámara después de las vacaciones de Navidad pero no podrá hablar del caso Mari Luz.

Y es que, apuntó Bravo, al ser también el presidente del Tribunal Supremo, no podrá pronunciarse acerca de la sanción de 1.500 euros impuesta al juez Tirado, que tras el recurso presentado por la Fiscalía todavía debe ser estudiada por el Alto Tribunal que preside Dívar. "La comparecencia está prevista para principios de año, una vez iniciado el año parlamentario para explicar las actuaciones y decisiones del Consejo con la limitación respecto a las decisiones que tienen que ser revisadas por el Tribunal Supremo", apuntó.

OPORTUNIDAD PERDIDA

Por su parte, el coordinador de Justicia y Libertades del PP, Federico Trillo, subrayó que Dívar "aún tiene pendiente su primera comparecencia tras haber sido nombrado presidente del Poder Judicial", antes de que llegara la petición de comparecencia del PSOE por el 'caso Mari Luz'. En todo caso, Trillo también advirtió que el Gobierno "no puede ponerse al frente de la manifestación por un caso en el que también han concurrido deficiencias en la Administración de Justicia por falta de medios".

El dirigente popular destacó que la asunción de responsabilidades por parte de la Administración de Justicia "es la gran asignatura pendiente del Poder Judicial en nuestra democracia". Además, Trillo criticó al CGPJ por perder una oportunidad para "declarar el anormal funcionamiento de la Administración de Justicia" en el 'caso Mari Luz' e "investigar a fondo" las responsabilidades de los diversos implicados en el caso y aseguró que el PP apoya el recurso de la Fiscalía para que sean los Tribunales de Justicia, a través del Tribunal Supremo, los que decidan sobre este asunto.