¿Qué hace un móvil resistente al agua y polvo? ¿Qué es el estándar IP?

Smartphone de Sony Xperia Z resistente al agua
SONY
Actualizado: lunes, 7 diciembre 2015 8:59

   MADRID, 7 Dic. (Portaltic) -

   Si nunca se te ha caído el móvil al fregadero, a la piscina, incluso al váter, es que eres muy cuidadoso. Para los que no lo son tanto, la tecnología es su mejor aliado. Hoy en día, prácticamente todos los ‘smartphones’ de alta gama son resistentes al agua y al polvo. Esa resistencia se mide con el estándar IP, que establece distintos grados de protección.

¿QUÉ ES LA CALIFICACIÓN IP?

   El estándar IP (Ingress Protection) hace referencia a los mecanismos de protección contra el polvo y el agua con los que cuenta un dispositivo.

   A través de este código, las compañías indican al usuario la robustez de sus terminales para hacer frente a estos problemas. De este modo, las siglas IP irán acompañadas por dos números.

   El primero de ellos hace referencia al nivel de protección contra el polvo y el segundo al grado de resistencia al agua. En los dos casos se cumple que, cuanto mayor es el dígito, mayor capacidad de protección presenta el dispositivo.

GRADOS DE PROTECCIÓN CONTRA EL POLVO

   IP0X: sin protección.

   IP1X: protegido contra los objetos sólidos mayores o iguales a 50 milímetros de diámetro.

   IP2X: protegido contra los objetos sólidos mayores o iguales a 12,5 milímetros de diámetro.

   IP3X: protegido contra los objetos sólidos mayores o iguales a 2,5 milímetros de diámetro.

   IP4X: protegido contra los objetos sólidos mayores o iguales a 1 milímetros de diámetro.

   IP5X: protegido contra el polvo; no se impide por completo la entrada del polvo, pero la cantidad que logre penetrar permite que el dispositivo siga funcionando de forma óptima.

   IP6X: protección completa frente a polvo.

GRADOS DE PROTECCIÓN CONTRA EL AGUA

   ¡Ojo! Protección contra el agua, no líquidos en general.

   IPX0: sin protección.

   IPX1: protegido contra gotas de agua que caen verticalmente.

   IPX2: protegido contra gotas de agua que caen cuando el terminal está inclinado hasta 15 grados con respecto a su posición normal.

   IPX3: protegido contra el agua rociada.

   IPX4: protegido contra las salpicaduras de agua.

   IPX5: protegido contra chorros de agua a baja presión.

   IPX6: protegido contra chorros de agua a alta presión.

   IPX7: protegido contra la inmersión completa en el agua hasta 1 metro y durante 30 minutos.

   IPX8: protegido contra la inmersión completa y continuada en el agua a cierta profundidad. El fabricante será el que especifique los límites, pero, en todo caso, tendrán que ser mayores que en el caso anterior.

SONY XPERIA Z5 Y SAMSUNG GALAXY S6

   El último buque insignia de Sony, el Xperia Z5, se presenta como el terminal de la compañía con el diseño líder resistente al agua y una clasificación IP68. En este caso, este ‘smartphone’ presenta los niveles más altos de protección posible, tanto para el agua como para el polvo.

   Sin embargo, en la letra pequeña, Sony advierte de que, pese a contar la mayor protección contra el agua posible, el usuario no podrá sumergir el dispositivo por completo, ni exponerlo a agua de mar, agua salada, agua clorada o líquidos como bebidas. En caso de incumplir con estas condiciones, el dispositivo perderá su garantía.

   En el caso de los Galaxy S6 de Samsung, pese a que sí presentan cierta protección tanto a polvo como al agua, no cuentan con una certificación IP, como sí ocurre con los Galaxy S5, que poseen una clasificación IP67, más resistentes al polvo que al agua.

CASO PARTICULAR DE APPLE

   A diferencia de sus grandes competidores, como Samsung y Sony, que enarbolan la resistencia al agua y polvo como una de las fortalezas de sus terminales, Apple nunca ha tratado de conseguir estos certificados IP para sus iPhone.

   Según iFixit, conocido por desmontar los dispositivos de Apple para analizarlos, los últimos teléfonos de la manzana, los iPhone 6S y 6S Plus, sí han mejorado su resistencia al agua, pero Apple no lo ha destacado en ninguna campaña de marketing ni comunicación.