SAN FRANCISCO, EEUU, 26 Abr. (Reuters/EP) -
Apple no sorprendió a nadie con otro trimestre repleto de números espectaculares, pero que no haya cumplido con los objetivos de ventas del iPad puede llevar a algunos a moderar sus opiniones.
Aparte del susto del iPad, los inversores parecieron encantados con las ganancias de la compañía, que prácticamente se han duplicado, lo que hizo subir su valor en bolsa un 2 por ciento.
Los sorprendentes datos aliviaron la principal preocupación de Wall Street: la presión sobre los márgenes por el desastre de Japón. Y pareció una libreta de calificaciones impoluta para Tim Cook, aparente heredero de Steve Jobs, que está de baja médica y del que se espera que no vuelva a su puesto.
Sin embargo, Apple tendrá por delante difíciles comparaciones interanuales en los próximos trimestres. Su crecimiento de doble dígito en las ventas, un vertiginoso 83 por ciento a casi 25.000 millones de dólares (17.172 millones de euros) en el trimestre pasado, puede ser difícil de mantener.
"Van a haber comparaciones en el lado del crecimiento", dijo Michael Walker, director de cartera en WP Stewart. "No pueden crecer un 83 por ciento siempre. No hay forma", añadió.
Apple vendió menos iPad de lo esperado, casi unos 5 millones frente a los 6 millones previstos, ya que la transición al nuevo modelo y los problemas en la cadena de suministro japonesa provocaron una escasez de componentes críticos.
IHS iSuppli estima ahora que Apple despachará 39,7 millones de unidades de todos los modelos del iPad este año, un 9,2 por ciento menos de los 43,7 millones que esperaba en febrero.
"Aunque Apple va camino de un incremento significativo de su volumen de producción en el segundo trimestre, la compañía sigue aún por debajo de su objetivo de producción para abril," dijo Rhoda Alexander, director de investigación en IHS.
Aun así, con 39,7 millones, la previsión de IHS está en el mejor nivel de las previsiones. BofA Merrill Lynch redujo su estimación de ventas de iPad a 26,4 millones, desde los 26,8 millones. JPMorgan estima que Apple venderá 27,3 millones, frente a la estimación previa de 28,9 millones.
Los inversores siguen mostrándose cautos ante los peligros de que una interrupción prolongada de la logística en Japón -que suministra más de una décima parte de los equipos electrónicos mundial- suponga a la cadena de suministro tecnológico mundial.
Apple, según se dice, depende de la segunda mayor economía de Asia para componentes internos y pantallas táctiles.
Las acciones de Apple terminaron la semana con una subida del 2,4 por ciento a 350,70 dólares (240,8 euros). Pero eso sólo sitúa a la compañía tecnológica más valiosa del mundo en el nivel que estaba antes del 11 de marzo.
Sin embargo, para la compañía la demanda no ha sido un problema. Las ventas del iPhone se duplicaron con creces y supusieron casi la mitad de los ingresos en el trimestre que concluyó en marzo. Sobre el iPad 2, Apple dijo que ha vendido todos los que ha podido producir.
El jueves, más de 20 corredurías elevaron sus precios objetivo para los valores, y Ticonderoga Securities espera que las acciones rocen los 612 dólares (420 euros) el próximo año.
"¿Es (Apple) una compañía madura? Sí ¿Está bien gestionada? Por supuesto", dijo Alex Gauna, analista de JMP Securities. "¿Hay talento interno más allá de Steve Jobs? Claro", añadió.
Apple se embarcó en la comercialización global de uno de sus productos de vanguardia, el iPad2, que ha tenido bastante éxito pese a la crisis económica y al terremoto en Japón, país que alberga a cientos de proveedores de componentes.
Apple ha registrado un impacto limitado en el trimestre en lo que respecta al suministro y dijo que no ve ningún problema que no pueda resolver.
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