Galicia puede aprovechar sus corrientes marinas que producen cuatro veces más energía que el viento

Actualizado: sábado, 23 febrero 2008 14:10

Investigadores gallegos avanza en el diseño de instalaciones que no entorpezcan lo menos posible la navegación y la actividad pesquera

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -

Las corrientes marinas de la costa gallega cuentan con una potencia ocho veces superior a la del viento que pueden llegar a producir cuatro veces más energía que la eólica "y está siendo desaprovechada".

Así lo lamentó en declaraciones a Europa Press Manuel Bao, catedrático de Ingeniería Química que, precisamente, está coordinando un equipo de investigadores de la Escola Técnica Superior de Enxeñería de la Universidade de Santiago (USC) que están avanzando en el diseño de una sistema que permita aprovechar este potencial energético, minimizando su impacto ambiental.

El coordinador de este proyecto admitió que el potencial en Galicia de las corrientes marinas no es "tan grande" como la eólica, porque recordó que en el aire las velocidades de entre cuatro a cinco metros por segundo ya son útiles para producir aereogeneradores. Sin embargo, en el agua estas velocidades son mas bajas.

No obstante, recordó que la densidad del agua es más elevada, "de ahí su potencial", por lo que ya produce energía una instalación subacuática que cuente con una velocidad de la corriente marina de "entre 80 centímetros a un metro por segundo".

De igual modo, subrayó el hecho de que esta energía, a diferencia de otras renovables como el viento, el sol o las olas, es continua y no varía en el tiempo. "Corrientes marinas hay siempre, de ahí su atractivo", enfatizó.

Así, reveló que la eólica puede contar en Galicia con 1.600 horas de viento al año; la solar, con 1.300 horas equivalentes de sol; mientras que las corrientes marinas suponen 8.700 horas en el mismo período de tiempo.

MAPA DE CORRIENTES DE MAREA EN GALICIA.

Bao explicó que el primer paso de este proyecto será definir el mapa de corrientes de marea que existen en la costa gallega. Un trabajo que lo realiza un grupo de Meteogalicia, dirigido por el profesor Vicente Pérez Muñuzuri.

Una vez identificadas las corrientes, su equipo de investigación está analizando qué modalidad de equipos se pueden emplear en cada caso, según las exigencias que impone el tipo de suelo con el que se encuentren debajo del agua y en el que se deberá encorar parte de la instalación.

Para ello, el equipo de la USC colabora en este proyecto con la empresa Gamesa, uno de los principales fabricantes de aerogeneradores del mundo. De este modo, la empresa proporcionará una turbina de nuevo diseño que irá bajo el agua para el aprovechamiento energético de las corrientes marinas.

"SACAR PARTIDO" DE ESTAS INSTALACIONES.

Bao aclaró que los ingenieros de la USC trabajan con la previsión de instalar la turbina a diez metros de profundidad para no entorpecer la navegación, además destacó que incluso se puede ancorar a 40 metros de profundidad.

De esta forma, los investigadores gallegos están estudiando como fijarían los equipos en el fondo marino, ya que el contacto con el agua implica problemas de restricción de materias.

No obstante, a más distancia los equipos ya tendrían que ir a flote. Sin embargo, Bao destacó que el sector puede "sacar partido" de estas plataformas flotantes porque estas instalaciones se pueden "aprovechar" para situar plantas de acuicultura e incluso contar con esta energía para el funcionamiento de la granja.

Asimismo, no consideró que este tipo de instalaciones supongan un "gran impacto" para la actividad pesquera en la zona donde se ubiquen y lo sustentó en el hecho de que se fijarán en lugares con una velocidad de la corriente marina "importante" que dificulta que sea una zona de pesca de arrastre.

REDUCIR DEPENDENCIA ENERGÉTICA DE OTROS PAÍSES.

El coordinador del proyecto recordó que la finalidad de este proyecto es recurrir a nuevas fuentes de energía, con el fin de reducir la dependencia de otros países. Según los datos aportados por los expertos, el abastecimiento energético de Europa depende en un 80 por ciento del exterior. En España, esta dependencia alcanza el 90 por ciento.

Ante esta situación, Bao advirtió de que la tendencia es a incrementar el consumo, por lo se mostró partidario de recurrir a toda forma de energía que se puede generar "desde dentro". "Estamos jugándonos nuestro futuro. Con las necesidades que tenemos, nuestra obligación es apoyar todas las fuentes de energía alternativa", proclamó.