Un informe revela que la mayoría de los niños hambrientos del mundo se concentran en el sureste de Asia

Actualizado: sábado, 14 octubre 2006 13:10


JOHANNESBURGO, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -

La región del sureste asiático se distingue por ser la zona donde existen más niños hambrientos, debido a que la discriminación de género obliga a las madres a subsistir con escasas dietas de comida, pero África sigue siendo el continente donde fallece el mayor número de niños del mundo, según un estudio divulgado por la agencia de noticias de la ONU IRIN.

El documento, titulado 'Índice de Hambre Global', se encarga de medir la malnutrición infantil a través del desarrollo físico de los niños y de la cantidad de vitaminas y minerales incluidos en su dieta. El informe abarca 97 países en vías de desarrollo y 22 países en transición hacia una sociedad de primer mundo y su publicación se produce días antes del Día Mundial de la Alimentación que se celebra en lunes.

"Las mujeres en el sureste asiático comen menos y comen las últimas", explicó Doris Weismann, autora del informe, publicado esta semana por el Instituto Internacional de Estudio para las Políticas de Alimentación.

Sin embargo, cada vez más niños mueren en el África subsahariana debido a la sequía constante y al alto índice de enfermedades, como el sida o la malaria, según Weismann. Cerca de 100 niños de cada mil menores de un año mueren en el África subsahariana, según UNICEF, que sitúa a Burundi, con más del 40 por ciento de desnutrición en su población infantil menor de cinco años, a la cabeza de la lista. Los 10 países que encabezan el informe se encuentran en África.

Por su parte, el sureste de Asia es la única región en la que las niñas corren un mayor peligro de desnutrición que los varones, según el informe sobre nutrición publicado por UNICEF. En India, una de cada tres mujeres adultas no llega a su peso normal y corren el peligro de dar a luz niños por debajo del peso mínimo recomendado por los especialistas.

Weisman señaló que las deficiencias vitamínicas ponen en peligro el sistema inmunológico de los niños, provocan defectos en el nacimiento y retraso en el desarrollo intelectual. Los países surafricanos han perdido hasta el 2 por ciento de su Producto Interior Bruto debido a las deficiencias nutricionales de su población, según otro estudio, publicado por la ONG canadiense Micronutrient Initiative, que tiene entre sus objetivos la eliminación de los problemas nutricionales a través del establecimiento de programas de desarrollo y proyectos de fortificación.

Además, los conflictos armados han agravado el problema del acceso a los alimentos. Los combatientes, según el estudio, emplean con frecuencia el hambre como herramienta para reducir la provisión de alimentos de la población opositora, a la que recorta los suministros y secuestra las ayudas nutricionales destinadas a los civiles.

"La mayoría de los países involucrados en guerras a gran escala desde 1989 a 2003 no puntúan muy alto en nuestro índice", destaca afirma Weisman.

El estudio señala paradojas demográficas que tienen lugar en el sureste de Asia. Así, indica que la mitad de los niños malnutridos del mundo se encuentran en India, Bangladesh y Pakistán, a pesar de que estos tres países sólo tiene el 29 por ciento de la población infantil menor de cinco años de los países en vías de desarrollo

A pesar de que estos números han descendido parcialmente en la región, las condiciones siguen sin ser insuficientes para alcanzar el Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM) que establece reducir a la mitad el número de niños desnutridos menores de cinco años para 2015.

PEOR EN EL CENTRO DE ÁFRICA

Desde la década de los 90 la mortalidad en este grupo ha disminuido sensiblemente en el centro y en el oeste de África, pero los objetivos siguen sin cumplirse, en parte por la falta de sensibilización internacional. Para Weisman, la falta de "voluntad política" es un tema crucial para solucionar estos problemas, pero también señaló que países como Ghana y Mozambique han realizado progresos para erradicar el hambre dentro de sus fronteras.

Sólo ocho países africanos --Túnez, Benin, República Democrática de Congo, Costa de Marfil, Gambia, Mauritania, Yibuti y Bostwana-- podrían alcanzar el objetivo propuesto por los ODM.

Desafortunadamente, el estudio refleja que en el este y en el sur de África la proporción de niños con síntomas de malnutrición se mantiene en los mismo niveles de los últimos 15 años. Sólo Botswana es la única excepción, pero el resto de países de la zona no ha mostrado ningún progreso debido al descenso de la producción agrícola, asociada con la sequía y los conflictos armados, incrementando los niveles de pobreza.