MADRID, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
Madrid y las regiones del Eje Mediterráneo son las "más cualificadas" para llevar a cabo la reinserción laboral de los inmigrantes parados procedentes de la construcción mediante su incorporación en el sector servicios, según concluyen dos expertas del Departamento de Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Barcelona, Catia Nicodemo y Rosella Nicolini.
En un estudio que bajo el título 'Inmigración y Desempleo: El impacto de la crisis en algunas comunidades autónomas' se ha publicado en el Anuario de la Inmigración 2010, las autoras señalan que estas regiones son las más preparadas "por la marcada importancia del sector de servicios en la creación de valor añadido".
"Las perspectivas de creación de empleo en las áreas de la dorsal mediterránea, junto con la evodente concentración de inmigrantes en este espacio, evitarán que el proceso de ajuste genere intensos movimientos de desplazamiento interno de inmigrantes a la búsqueda de una ocupación", señalan.
Las autoras destacan asimismo que tres cuartas partes de los parados en España son jóvenes de entre 16 y 29 años, y, el perfil tipo del trabajador que se encuentra en desempleo es el de un hombre extranjero que previamente estaba empleado en la construcción.
Por eso, el estudio plantea si este grupo de desempleados podrá volver al mercado de trabajo y afirma que "no se tratará de volver al mismo sector, sino a otro que, por dinámica y amplitud, pueda incorporarlos como, por ejemplo, el sector de los servicios", aunque apostilla que para ello, "es fundamental una voluntad de recualificación".
Por otra parte, el Anuario recoge además un trabajo de dos expertos del Centro de Estudios Andaluces, Ignacio García Pérez y Davoz Troncoso Poncio, en el que destacan que son los trabajadores temporales quienes "más están sufriendo las consecuencias de la grave crisis económica", no sólo por registrar mayores tasas de destrucción de empleo, sino porque "sus salarios han sufrido caídas muy importantes en los dos últimos años".
En este sentido, concluye que "la excesiva temporalidad del mercado de trabajo está recayendo de manera dramática sobre los colectivos más desfavorecidos, siendo los inmigrantes el ejemplo paradigmático de esta injusta consecuencia de la legislación laboral" en España.
