El Papa condena los ataques a civiles en los conflictos en Ucrania y Gaza como "crímenes de guerra"

El Papa en una foto de archivo
El Papa en una foto de archivo - Evandro Inetti/ZUMA Press Wire/d / DPA
Actualizado: lunes, 8 enero 2024 13:54

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ROMA, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Papa ha condenado que los ataques a civiles en los conflictos en Ucrania y Gaza que ha definido como "crímenes de guerra" rechazando que se consideren "daños colaterales". Además, ha mostrado su preocupación por la situación en Nicaragua y, en concreto, por la persecución del régimen de Daniel Ortega a obispos y sacerdotes.

"No debemos olvidarnos de que las violaciones graves del derecho internacional humanitario son crímenes de guerra, y que no es suficiente con evidenciarlos, sino es necesario prevenirlos", ha señalado Francisco en su discurso ante los embajadores acreditados ante la Santa Sede.

Así, el Papa ha renovado su llamamiento a la comunidad internacional para impulsar la adopción de dos Estados para Israel y Palestina y para lograr un estatuto especial internacionalmente garantizado para la Ciudad de Jerusalén.

En su discurso más geopolítico del año, el Papa ha exigido también "un mayor compromiso de la comunidad internacional" con el derecho humanitario y ha renovado su propuesta para "constituir un Fondo mundial para eliminar de una vez por todas el hambre y promover un desarrollo sostenible para todo el planeta".

"¿Cuántas vidas se podrían salvar con los recursos que hoy se destinan a los armamentos? ¿No sería mejor invertir en favor de una verdadera seguridad global?", se ha preguntado.

El Pontífice -que ha mostrado su preocupación por que el actual conflicto en Gaza desestabilice "ulteriormente una región frágil y cargada de tensiones" - ha condenado "el ataque terrorista contra la población de Israel del pasado 7 de octubre, en el que fueron heridos, torturados y asesinados de manera atroz tantos inocentes y en que muchos otros fueron tomados como rehenes". Igualmente, ha hecho un llamamiento a todas las partes implicadas para que acuerden "un alto el fuego sobre todos los frentes", incluso en el Líbano, y para la inmediata liberación de todos los rehenes en Gaza".

"Sigue siendo preocupante también la situación de Nicaragua; es una crisis que se prolonga desde hace tiempo con dolorosas consecuencias para toda la sociedad nicaragüense, en particular para la Iglesia católica", ha manifestado también. Por ello, ha insistido en la necesidad de "un diálogo diplomático respetuoso por el bien de los católicos y de toda la población".

En su alocución, en la que ha hecho un análisis de los conflictos abiertos en el mundo, el Papa también ha lamentado "los casi dos años de guerra a gran escala de la Federación Rusa contra Ucrania". "La deseada paz no ha logrado todavía encontrar sitio en las mentes y en los corazones, a pesar de las numerosísimas víctimas y la enorme destrucción", ha condenado ante los embajadores de todo el mundo en la denominada Aula de las Bendiciones del Palacio Apostólico vaticano.

La Santa Sede mantiene actualmente relaciones diplomáticas con 184 Estados, de los que 91 tienen una representación en Roma.

Francisco también ha mostrado su "preocupación también por la tensa situación en el Cáucaso meridional entre Armenia y Azerbaiyán, exhortando a las partes a llegar a la firma de un tratado de paz".

Al recordar la situación en el continente americano, Francisco ha detallado que "si bien no hay guerras abiertas" en la región, "existen fuertes tensiones entre algunos países, por ejemplo, entre Venezuela y Guayana, mientras que en otros, como Perú, observamos fenómenos de polarización que socavan la armonía social y debilitan las instituciones democráticas".

El Papa ha apelado a una "política de desarme mundial" y al diálogo como "alma de la comunidad internacional", además de evitar "las colonizaciones" y "polarizaciones ideológicas".

En África ha destacado "el sufrimiento de millones de personas debido a las múltiples crisis humanitarias (...) a causa del terrorismo internacional, de los complejos problemas socio-políticos y de los efectos devastadores del cambio climático"; y ha lamentado "los dramáticos acontecimientos en Sudán", "así como las situaciones de los desplazados en Camerún, Mozambique, República Democrática del Congo y Sudán del Sur".

El Papa también ha elogiado como "un paso estimulante" la adopción del documento final en la COP28 de fines del año pasado y, en ese ámbito, ha asegurado que hay "desastres que también son atribuibles a la acción o la negligencia humanas y que contribuyen gravemente a la actual crisis climática, como la deforestación de la Amazonia, que es el pulmón verde de la tierra".