MADRID, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Coordinadora Estatal de Asociaciones Solidarias con el Pueblo Saharaui (CEAS-Sáhara) ha declarado "persona non grata" al ministro marroquí del Interior, Taieb Cherkaoui, por considerarle el responsable de dar la orden de desmantelar el campamento a las afueras de El Aaiún "tras haber fracasado en su misión de negociador encargado por el rey de Marruecos" pasando, de esta forma, "de negociador a artífice de la brutal represión que sucedió al desmantelamiento".
CEAS-Sáhara ha exigido a las autoridades marroquíes que "pongan fin a la detención, acoso e intimidación de la población saharaui", para lo que ha reclamado a todas las organizaciones de defensa de los derechos humanos que denuncien la "persistente violación del derecho a la libre determinación del pueblo saharaui, mediante un referéndum libre, transparente y justo".
En un comunicado, esta coordinadora critica al Ministerio del Interior español por sumarse al "cerrojazo informativo" que ha impuesto Marruecos sobre los acontecimientos que están ocurriendo en el Sáhara Occidental. "Esta reunión solo puede entenderse como una provocación", ha argumentado en relación con la reunión entre Taieb Cherkaoui y Alfredo Pérez Rubalcaba.
"Aún no conocemos en profundidad lo allí acaecido, debido a la intransigencia del reino marroquí en facilitar la entrada a observadores internacionales y medios de comunicación que puedan verificar in situ lo que allí está pasando", ha lamentado CEAS-Sáhara, para quien "la estrategia marroquí culmina en estos días con la campaña de intoxicación con la que intenta justificar y amortizar los gravísimos hechos ocurridos en el Aaiún, y que no resulta novedoso a los conocedores de sus artimañas".
Según esa plataforma, Marruecos "en un principio mostró desinterés y desprecio ante la movilización más numerosa que la población saharaui ha llevado a cabo desde la vergonzante salida de España del territorio, actualmente ocupado militarmente por Marruecos". Frente a esto, CEAS-Sáhara ve "vergonzoso e intolerable" que el Gobierno de España "continúe sin condenar taxativamente la brutal represión ejercida por el Reino de Marruecos".
