Acuchillan en prisión a uno de los secuestradores de la chica de Centelles (Barcelona)

Actualizado: domingo, 13 julio 2008 15:12

  

   BARCELONA, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -


   Uno de los cinco secuestradores de la joven de 19 años que permaneció durante dos meses cautiva y vejada en una caseta en Centelles (Barcelona) ingresó hoy en el Hospital Clínic de Barcelona tras ser acuchillado en la cárcel Modelo, donde había ingresado por orden de la juez, según confirmaron fuentes hospitalarias a Europa Press.

   La víctima de la agresión, Juan E. J., de 25 años, que había sido compañero sentimental de la víctima del secuestro, fue agredido ayer por un recluso que le clavó un objeto cortante en el cuello. Fuentes de la investigación aseguraron que el jove fue acuchillado por encargo, para hacer justicia dentro de la cárcel.

   Juan E.J. ingresó ayer de urgencia en el área de cirugía del citado hospital y tras ser intervenido volvió a salir el mismo día. Según informó hoy la Conselleria de Justicia de la Generalitat, el joven "requirió atención médica para ser atendido por una herida incisa causada por otro interno del centro", que ya ha sido aislado.

   A pesar de no revestir gravedad fue trasladado al Hospital Clínic, añadió en un comunicado colgado en su página web, consultado por Europa Press.

   Al parecer, el arma utilizada fue un diábolo --una cuchilla de afeitar desmontada y unida a un bolígrafo o cepillo de dientes-- y gracias a la intervención de los funcionarios del centro penitenciario se evitó que el recluso acabara con la vida de la víctima.

   Esquirol ingresó provisionalmente en prisión el pasado miércoles, junto a otras cuatro personas acusadas de secuestrar y vejar a una chica de 19 años en Centelles. Según informó la Policía catalana, los detenidos presuntamente retuvieron durante dos meses a la chica, la agredieron reiteradamente y uno de ellos la violó. Los agentes la hallaron con el pelo rapado, hematomas en el cuerpo y heridas de arma blanca en las piernas.

   La joven estaba tapada con una manta en una caseta de transformadores de luz abandonada, en una zona boscosa cerca del cementerio de la localidad. Sus captores, de etnia gitana al igual que ella, la mantenían atada y sólo le daban de comer de vez en cuando.

   Según la investigación de los Mossos, la mujer fue retenida por una disputa familiar. Se fue a vivir a la casa de la familia de dos de los detenidos por voluntad propia para estar con su pareja, pero al acabar con la relación, no la dejaron irse.

   Los agentes dieron con el escondite donde mantenían retenida a la joven después de iniciar una búsqueda por la zona y localizar a cuatro personas dirigiéndose hacia allí. Al llegar al recinto, encontraron a otra persona y a la mujer en un estado "deplorable", por lo que la que trasladaron al Hospital General de Vic, aunque ayer fue dada de alta.