AMPL.- Dados de alta todos los niños ingresados por intoxicación por monóxido de carbono en una guardería en Navarra

PAMPLONA, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -

Los 27 niños ingresados en distintos centros hospitalarios por una intoxicación leve por monóxido de carbono en una guardería de Mutilva Baja han sido dados de alta y sólo permanecen ingresados dos de los siete adultos trasladados. Se trata de dos mujeres de 33 y 44 años, según informó esta tarde el Gobierno de Navarra en un comunicado.

El suceso tuvo lugar hoy, sobre las 12.20 horas, en la guardería Kuluxka, situada en la Plaza Idoi, número 4, de Mutilva Baja (Valle de Aranguren). El director del Hospital Virgen del Camino, Fernando Boneta, informó esta tarde en rueda de prensa de que "al parecer la causa ha sido una mala ventilación de una caldera de calefacción".

Según el Ejecutivo foral, una mujer de 33 años queda ingresada en observación de urgencias general del Hospital Virgen del Camino, mientras que en el Hospital de Navarra permanece una paciente de 44 años, "que posiblemente en poco tiempo sea trasladada a su casa".

Al Hospital Virgen del Camino fueron trasladados 26 niños, 12 chicas y 14 chicos, de edades comprendidas entre 6 y 35 meses. Hasta urgencias de este hospital también se derivó a dos mujeres de 33 años. Asimismo, la Clínica Universidad de Navarra atendió a una niña de 24 meses. Por otro lado, cinco personas fueron trasladadas al Hospital de Navarra, cuatro mujeres de entre 25 y 44 años, y un hombre de 45 años.

La Agencia Navarra de Emergencias, tras ser alertada del suceso a las 12.21 horas, movilizó cuatro ambulancias, dos de ellas medicalizadas. Además, acudieron al lugar del suceso patrullas del Área de Seguridad Ciudadana de la Policía Foral y la Policía Municipal del Valle de Aranguren. La Policía Judicial de Policía Foral se encarga de la investigación del suceso.

Junto a Boneta, compareció esta tarde el jefe del servicio de Pediatría del Hospital Virgen del Camino, Enrique Bernaola, quien destacó la importancia de que los trabajadores del centro se hayan dado cuenta pronto del problema. "Ha sido una fortuna importante, porque si no, estaríamos ante una tragedia de dimensiones difíciles de calcular", aseguró.

Según relató, "un adulto, que estaba cerca de la fuente de monóxido de carbono, fue el que levantó la alarma, al tener una pérdida de conciencia". "Afortunadamente, la situación de los niños ha sido relativamente buena; prácticamente todos tenían un nivel de intoxicación levemente moderada, entre un 20 y un 25 por ciento", indicó.