Desarticulada una red de tráfico de drogas entre Arévalo (Ávila), Madrid y Guadalajara con 23 detenciones

Actualizado: viernes, 27 junio 2008 16:27

ÁVILA, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -

Una operación contra el tráfico de drogas desarrollada desde hace meses entre las provincias de Guadalajara, Madrid y Ávila se ha saldado con 23 detenciones, cortando así la principal vía de entrada de cocaína a Arévalo, en el norte de la provincia abulense.

Según informó hoy la Guardia Civil, las investigaciones se remontan a finales del verano de 2007, cuando se detectó en Arévalo y localidades cercanas "un notable aumento de consumo de sustancias estupefacientes", y que "había despertado una cierta alarma social, especialmente en aquellos padres que tienen hijos menores de edad", que comenzó a trabajar con agentes de la Unidad Orgánica de Policía Judicial en la operación Atento, manteniendo al tanto al Juzgado de Instrucción de Arévalo.

Los primeros pasos "dejaron en evidencia que existía una trama de personas dedicada a la introducción de cocaína en Arévalo y Tiñosillos", y que una de las principales vías procede de Madrid.

Después, el principal investigado se dedicaba a "cortarla" y distribuirla para que llegase a los consumidores finales.

Entre los distribuidores se encuentran dos individuos "plenamente identificados", uno de ellos con una orden de búsqueda, detención y personación del Juzgado de Instrucción número 2 de Valladolid.

A la vez, se identificaron a otras cuatro personas de la zona de Tiñosillos, que adquirían la droga al vendedor de Arévalo, y se comprobó que algunas de ellas vendía tanto cocaína como marihuana y hachís.

Al cabo de varios meses se observó la relación entre quienes actuaban en Arévalo y Tiñosillos con una red organizada de tráfico de estupefacientes en Madrid y Guadalajara, ya que participaban más de dos personas, cada una de ellas llevaba a cabo unas tareas específicas con una actuación prolongada, donde había disciplina, con búsqueda de beneficios y el uso de estructuras comerciales.

Tras la identificación de las personas y localizados los domicilios, y al considerar los agentes que las investigaciones "habían alcanzado un punto desde el que era especialmente difícil dar nuevos pasos hacia adelante", el 10 de junio se iniciaron los trámites para desarticular la red con la detención de 23 personas.

En los registros se les intervino 1.895 gramos de sustancia de corte, tres balanza se precisión, 41.000 euros, dos navegador GPS, documentación relacionada con el delito investigado, seis piedras esmeraldas de color verde, dos cajas de caudales, 24 teléfonos móviles, 1,180 gramos de marihuana, una pistola de aire comprimido, 0,5 gramos de hachís, un gramo de cocaína, y papeles con restos de cocaína.

De las detenciones, 11 fueron en Arévalo: A.G.M., de 33 años; M.P.R.S., de 33; E.M.G.M., de 34; F.C.B., de 39; D.G.M., de 25; J.G.M., de 23; J.M.S.B., de 37; J.C.Z.G., de 36; D.G.R., de 40; L.M.C.S., de 22; y R.G.R., de 30 años.

Las detenciones en Guadalajara fueron seis: S.C.S., de 46 años; E.M.M., de 33; F.J.M.A., de 55; F.E.A.G., de 37; A.M.A.G., de 34; y O.I.B., de 37; mientras en Madrid se detuvo a cinco personas: F.F.B.A., de 29 años; G.V.R., de 41; A.P.O., de 46; E.S.S., de 37; y L.A.L.P., de 56; y en la localidad madrileña de Alcalá de Henares a A.F.M., de 48 años.

La Guardia Civil considera la participación de todos los detenidos en el delito, dado que tanto la droga aprehendida como los demás efectos fueron intervenidos en todos los registros efectuados, y que la con la desarticulación de esta red se corta una de las principales vías de suministro de estupefacientes a Arévalo y su comarca, y se contribuye a paliar una de las de Madrid y Guadalajara, a la vez que han destacado "lo variopinto de los consumidores, ya que la droga llegaba a personas muy jóvenes incluyendo algunos menores de edad".

También se han subrayado las "numerosas dificultades" de la investigación, sobre todo a la hora de llevar a cabo los seguimientos y vigilancias "dado el círculo tan cerrado en el que se movían los objetivos", por un lado pequeñas poblaciones como Arévalo y Tiñosillos, en las que los agentes son conocidos por los objetivos y, por otro, el hecho de que algunos de éstos se movieran por Guadalajara y Madrid, " con la consiguiente falta de inmediatez cuando la actuación era necesaria en ese momento".