VALENCIA, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
La dirección del Establecimiento Penitenciario de Picassent (Valencia) reclamó hoy a la Fiscalía y a las Autoridades Judiciales que ejerzan "con rotundidad" las acciones legales previstas en el ordenamiento jurídico, ya que constituyen "la verdadera salvaguarda de los agentes de la autoridad en el ejercicio de sus funciones".
Así, se pronunciaron, en un comunicado, fuentes de la dirección de la cárcel de Picassent tras la agresión registrada el domingo en el centro penitenciario, en el que un funcionario fue agredido por uno de los internos. El preso golpeó con una de las pesas utilizadas en los gimnasios, de 10 kilos, a un jefe de servicios que intentaba convencerle para ser trasladado a la cárcel de Castellón II (Albocàsser), lugar al que están siendo llevados los primeros presos de este establecimiento.
Desde la dirección del centro destacaron "la ejemplar actuación" el pasado domingo "de unos funcionarios que aún a riesgo de su integridad física trataron de solventar una situación conflictiva evitando una acción contundente contra el mismo agresor".
La Dirección del Establecimiento Penitenciario de Picassent se ha reunido con los representantes sindicales del centro para exponerles detalladamente el suceso, las decisiones adoptadas tras él y las propuestas al Centro Directivo.
Los responsables de esta prisión esperan que la sociedad valenciana sea consciente de "la importante labor social que el funcionario de Instituciones Penitenciarias desempeña constantemente, haciendo cumplir rectamente las sentencias y procurando transformar el tiempo de privación de libertad en periodo de reeducación".
Asimismo, confiaron en que los internos "sepan aprovechar los recursos que las administraciones públicas ponen a su disposición durante el cumplimiento de su condena para volver dignamente a la sociedad", al tiempo que agradecieron "los gestos de repulsa que muchos internos han manifestado por la lamentable agresión sufrida por el Jefe de Servicios". Al respecto, mostraron su deseo de "seguir contando con la mayor rectitud, dedicación y profesionalidad de todos los funcionarios de este centro".
Por otro lado, comentaron que tras producirse el incidente del domingo, el preso que lo ocasionó fue controlado "de inmediato" por el jefe de centro, ayudado por el mismo jefe de servicio que sufrió la agresión y otros funcionarios que acudieron en su ayuda y fue internado en una celda.
REGRESIÓN A PRIMER GRADO
Por parte de la dirección del centro de Picassent propusieron la regresión del preso a primer grado --el régimen de vida más restrictivo que existe-- y su traslado al Centro que la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias considere oportuno.
El agresor tiene pendiente una condena de 16 años, 18 meses y 87 días por varios delitos de lesiones, resistencia, receptación, contra la salud pública, robo con fuerza o hurto. Éste es sexto ingreso en prisión y con frecuencia ha estado incluido en módulos que albergan a los internos con mala conducta, explicaron las mismas fuentes.
