El incendio declarado este lunes en la localidad leonesa de Castrillo de los Polvazares (León) que ha afectado a un total de 800 hectáreas, se encuentra "estabilizado y atajado" sin darse aún por controlado. El fuego, ahora de nivel 1 de riesgo, llegó a alcanzar la consideración máxima de peligrosidad cuando, debido a las fuertes rachas de viento en la tarde del lunes, amenazó a las poblaciones de Piedralba, Oteruelo de la Valduerna y Morales de Arcediano. Según la información proporcionada por el delegado territorial de la Junta de Castilla y León en León, Eduardo Diego, desde el Puesto de Mando Avanzado, en este momento ya no existe riesgo para estas localidades.