Un estudio indica que las hachas de mano más antiguas de Europa están en los yacimientos del sureste peninsular

Actualizado: jueves, 3 septiembre 2009 17:31

GRANADA, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -

Un estudio elaborado por los investigadores Luis Gibert y Gary R. Scott señala que las hachas de mano encontradas en los yacimientos del sureste peninsular datan de hace 900.000 años, lo que las convierte en las más antiguas de Europa y refuerza la teoría del fallecido José Gibert Closs de que el Estrecho de Gibraltar fue el lugar de paso de los homínidos desde África.

En el marco de este amplio estudio, que publica hoy la revista científica 'Nature', han sido analizados los yacimientos de la Solana del Zamborino (Granada) y el de Cueva Negra (Murcia), a los que se atribuía inicialmente una edad de entre 100.000 y 400.000 años, según explicó hoy en rueda de prensa en Granada Luis Gibert.

No obstante, las nuevas dataciones obtenidas en el yacimiento de Solana del Zamborino lo envejecen hasta como mínimo 760.000 años y hasta los 900.000 en el caso del yacimiento de Cueva Negra, que se convierte así en el más antiguo de Europa.

Estos nuevos datos indican que la transición de la cultura lítica olduwaiense --cantos trabajados de forma unifacial-- a la industria achelense --hachas de mano realizadas de forma bifacial-- se dio en Europa hace 900.000 años o más y no 500.000 como se pensaba hasta ahora.

Los resultados de este trabajo indican también que existió una ocupación humana continuada en el Sureste de Iberia durante el Pleistoceno Inferior que empezó al menos hace 1,4 millones de años, edad del yacimiento con restos humanos de Venta Micena.

Los primeros bifaces aparecen en África hace 1,5 millones de años y están asociados con el 'Homo ergaster' y 'Homo erectus', por lo que su aparición implica una mayor capacidad cognitiva que permitió a nuestros antepasados producir herramientas con una forma simétrica predeterminada.

Así, Gibert considera que el hecho de que las evidencias europeas más antiguas de culturas líticas olduwaienses y achelenses --ambas con origen africano-- se encuentren en el sureste de la Península Ibérica sugiere que el Estrecho de Gibraltar fue "una barrera permeable a los homínidos durante el Pleistoceno Inferior".

Este hecho está apoyado por la presencia de fauna africana en el yacimiento murciano de Cueva Victoria y por la casi total ausencia de bifaces entre el este de Italia e Israel.