El Aeropuerto de Asturias pone en marcha un servicio decetrería con halcones para el control de aves

Actualizado: miércoles, 12 agosto 2009 15:55

OVIEDO, 12 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Aeropuerto de Asturias ha puesto en marcha un servicio de cetrería para el control de aves en la infraestructura asturiana que llevará a cabo la empresa Locus Avis S.L. Aena incrementa de esta manera los medios que ya tenía en su Servicio para el Control de la Fauna (SCF) y que hasta el momento consistían en cartuchos pirotécnicos, cintas con sonidos ahuyentadores y distintos sistemas basados mayoritariamente en ruidos para alejar a las aves.

El acto de presentación se llevó a cabo hoy en el Aeropuerto de Asturias y contó con la presencia del director del aeropuerto, Luis Rubio.

El director señaló que cuando en los aeropuertos de la red de Aena la presencia de aves es regular, previsible y la operación aérea puede verse afectada de alguna manera es habitual la contratación de un SCF basado en el empleo de la cetrería que complementa a distintos medios mecánicos.

El problema que pueden significar las aves para el tráfico aéreo está planteado a nivel mundial, y tiene una especial relevancia en España por su situación geográfica, clima y diversidad paisajística, que sirve de soporte a una de las avifaunas más ricas del continente.

El SCF mediante cetrería está contratado por Aena en 29 aeropuertos de la red, contratado por el Ejército del Aire en cinco Bases Aéreas abiertas al tráfico civil, dos de ellas en colaboración con Aena, y además están realizando pruebas en varios aeropuertos más ante la presencia temporal de poblaciones de aves en sus recintos.

Si se incluyen las tres Bases Aéreas de uso exclusivo militar que tienen este servicio, y el reciente aeropuerto de Ciudad Real, que no pertenece a la red de Aena, desde que se inició este servicio de control de fauna por medio de la cetrería en los aeropuertos comerciales (en 1970) son 40 los centros en que se están empleando unas técnicas comunes frente a un problema que presenta unas características diferentes en cada región.

El incremento paulatino del número de centros que adoptan este servicio se debe a la evolución natural de las especies, interpretándose como una reacción natural a la transformación progresiva de sus hábitats naturales que las obliga a buscar nuevas áreas de ocupación.

La permanencia de este servicio en cada uno de los centros en que se ha ido contratando tiene un carácter preventivo, en la consideración de que el retorno de una población desplazada puede producirse en el momento que desaparezcan las causas de su desplazamiento, pues los factores de atracción del aeropuertos permanecen sin variaciones importantes y las presiones en el entorno es frecuente que se vayan incrementando.

PROBLEMAS IDENTIFICADOS

En cuanto a los problemas identificados, se pueden agrupar por zonas. Así en los aeropuertos costeros es frecuente que las gaviotas busquen refugio ante situaciones de temporal en el mar; estas aves también aparecen con cierta frecuencia en sus desplazamientos hacia los basureros, aunque estén alejados de la costa o del aeropuerto.

Por parte de las aves esteparias o de llanura existe una tendencia muy acusada a instalarse en los aeropuertos del interior peninsular y en estos aeropuertos también es frecuente tener que actuar ante la presencia de cigüeñas, especialmente durante sus vuelos migratorios.

Distintas especies de garzas son frecuentes en la franja mediterránea y Andalucía, y son importantes las invasiones de avefrías y otros limícolos en los aeropuertos del Cantábrico cuando hay olas de frío acusadas en el centro de Europa.

Un problema común a gran número de aeropuertos son las palomas, especialmente en las islas, y también es frecuente la presencia de rapaces medianas o pequeñas que acuden a estos recintos en busca e alimento, como saltamontes, roedores y reptiles.

Estos problemas pueden plantearse con mayor o menor intensidad en cada uno de los aeropuertos según la época el año o las condiciones meteorológicas, variando también con los ciclos agrícolas del entorno, los ciclos biológicos de los insectos y otros factores que se manifiestan de forma distinta en cada comarca.