LAREDO, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Obispado de la Diócesis de Santander ha otorgado autorización al Ayuntamiento de Laredo para la ejecución del proyecto de mejora de la movilidad y accesibilidad en la Puebla Vieja de la villa.
La institución eclesiástica es titular de la finca en la que se integra el arco de la muralla en el que está previsto que se produzca el desembarque del ascensor que permitirá acceder al cementerio y a la iglesia parroquial Santa María la Asunción de Laredo.
El equipo de Gobierno prevé licitar de forma "inminente" esta fase del proyecto, dejando para una segunda fase la ejecución prevista en la plaza de la Constitución, donde resta por obtener el visto bueno de los vecinos de un inmueble para integrar en su propiedad el ascensor previsto para salvar la escalinata de acceso a la Ruamayor.
Así lo ha informado este viernes el Consistorio, que ha recordado que hace días remitió al Obispado los planos y fotomontajes que ilustran la actuación que se pretende llevar a cabo.
En el documento el Ayuntamiento pejino se compromete a "ajustarse estrictamente" al proyecto en lo referente a las afecciones a esta propiedad, y a "reponer cuantos posibles daños materiales pudieran causarse al resto de la finca eclesiástica".
Lo han rubricado así el vicario general del Obispado, Manuel Herrero Fernández, y el alcalde en funciones de Laredo, Ramón Arenas, en presencia del delegado del Patrimonio Cultural de la Diócesis de Santander, José María Ruiz.
Tal y como recoge el documento suscrito, el Obispado tiene atribuida la defensa de su patrimonio, "sin perjuicio de considerar que resulta también de su interés facilitar, en la medida de lo posible, no sólo el acceso a la zona de la ciudadanía en general, sino también a los fieles que acudan a los oficios, así como a las personas que deseen visitar a sus difuntos en el cementerio anejo a la Iglesia de Santa María".
El proyecto municipal incluido en el expediente 484/2014 contiene entre sus previsiones la ejecución de un acceso habilitado para personas con movilidad reducida que, mediante un ascensor asentado en el parque público ubicado a la altura del número 25 de la calle San Marcial, desembocaría en una rampa que conectaría con el arco del muro que circunda la iglesia de Santa María en su parte noroeste.
COLABORACIÓN
Ramón Arenas ha expresado su satisfacción por la "actitud de total colaboración brindada por el Obispado para despejar cualquier obstáculo a la actuación", y ha resaltado que ya en su día el propio párroco, Romualdo Fernández, expresó su aval a dicho proyecto durante la Misa Mayor del día de la patrona de Laredo, Nuestra Señora de la Asunción, en vista de las "dificultades" que actualmente tienen los fieles para acceder al templo laredano para asistir a los distintos oficios religiosos.
El alcalde en funciones ha aprovechado para recordar que el proyecto aprobado en pleno el pasado mes de agosto será ejecutado en dos fases. La primera, que será licitada de manera inminente, aglutinará tres actuaciones: la rampa de la Cuesta del Infierno, la rampa que conecta Merenillo con San Marcial, y el ascensor que desemboca en la trasera de la iglesia. En una segunda fase se acometerá el ascensor de la plaza de la Constitución.
Actualmente se está en conversaciones con los propietarios del inmueble situado a la izquierda de las escalinatas de subida a Ruamayor, ya que la intención del equipo de Gobierno, desde el primer momento, ha sido integrar el ascensor en dicho edificio. Una actuación que "goza del pleno respaldo" de la Dirección General de Cultura.
Sólo en el caso de que no se alcance un acuerdo, se activaría alguna de las propuestas alternativas que prevén situar en una zona exterior el elevador que permitirá eliminar una de las barreras arquitectónicas más importantes de cuantas dificultan el tránsito por la Puebla Vieja, ha apuntado el Ayuntamiento para finalizar.
