Lo que se le pedía sixtuplicaba el gasto habitual del cliente y el juez vincula la "anomalía" a fallos tras un cambio de contadores
SANTANDER, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de Primera Instancia Número 10 de Santander ha rebajado de 550 euros a unos 80 el recibo que le reclamaba E.ON a un cliente, que sixtuplicaba su gasto habitual, al considerar que la cantidad facturada "no resulta fiable" ni respondía "a un consumo real" y vincular la anomalía a los fallos que se habían producido por un cambio de contadores que se había realizado justo antes.
El cliente al que E.ON le reclamaba esta cantidad, que ahora se ha visto reducida, era una empresa de construcción que había contratado con E.ON el suministro de luz en una obra en Piélagos.
En el juicio, E.ON señaló que el consumo facturado a esta empresa por este periodo --que iba del 5 al 18 de agosto de 2011- es el que le facilitó en su día la distribuidora, que es la que tiene acceso y control sobre el contador del consumo y fue también la que cambió los aparatos de medición por otros nuevos, causando incidencias informáticas que afectaron a la captura de los registros de lecturas de los consumos.
Según la sentencia, esta reconocida anomalía en la lectura de los consumos, "no imputable" al cliente y producida en una fecha "coetánea" a la facturación de este consumo, que sixtuplicaba el que venía siendo habitual según las facturas inmediatamente anteriores, "permite fijar", según el juez, un "nexo causal directo entre la incidencia detectada y la anómala cantidad facturada".
"Dicha cantidad facturada no resulta fiable, ni por tanto responde a un consumo real, de modo que el demandando no adeuda la suma reclamada", establece el juez.
Para calcular lo que debe pagar la empresa de construcción a la que se le reclama el recibo, el juez realiza un promedio del consumo diario de los dos meses anteriores y lo multiplica por los trece días de facturación anómala, dando como resultado 74,68 euros y no los 546,43 que E.ON le reclamaba.
