Mediavilla asegura que se cumplirá la normativa "a rajatabla" y niega "discrepancias" en el Ejecutivo, que apuesta por las renovables
SANTANDER, 5 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Cantabria ha reconocido que tendrá que actualizar, modificar o sustituir el actual plan energético de la Comunidad (el Plenercan, vigente desde 2006 hasta 2011), para adaptarlo al desarrollo eólico previsto por el Ejecutivo, ya que si bien el concurso de asignación de potencia contempla el reparto de 1.500 megavatios en siete zonas de la región, "hoy por hoy, con el Plenercan vigente sólo se pueden materializar 300 megavatios en tres zonas de Cantabria".
Así lo indicó hoy el consejero de Presidencia y Justicia, Vicente Mediavilla, quien, en respuesta a preguntas de los periodistas sobre el desarrollo eólico y su posible modificación, consideró que "el debate se ha anticipado", lo que ha creado "confusión".
Aclaró en este sentido que "no hay ningún plan eólico", sino que sólo se ha convocado un concurso de adjudicación de potencia, lo que no equivale a la implantación de los parques en sí.
Citó así a una cláusula del concurso según la cual la adjudicación de potencia "no prejuzga la futura instalación de los parques", instalación que se someterá a "toda" la normativa que esté "en vigor" en ese momento, sea el Plenercan, la Ley de Evaluación Ambiental, la normativa urbanística o cualquier disposición de carácter sectorial, comentó.
Por tanto, una vez se resuelva el concurso se cumplirá "a rajatabla" toda la normativa sectorial, en lo que es ya la "segunda fase" del proceso.
En este sentido, el titular de Justicia abogó por dar "estricto cumplimiento" al Plenercan o al instrumento que modifique, revise, actualice o sustituya este plan, que tiene vigencia hasta 2011. Igualmente, habrá que dar también "estricto cumplimiento" a "toda" la normativa ambiental y urbanística.
"En Cantabria no se va a implantar ningún parque eólico que no cumpla con la normativa de planificación energética, con la normativa medioambiental y con trámite preceptivo de información pública en el que cualquier ciudadano tendrá derecho a alegar lo que estime conveniente y oportuno", subrayó el consejero, para advertir de que los proyectos "que no cumplan" la normativa "no podrán ser autorizados".
En relación a la revisión o reforma del Plenercan, precisó que no se va a hacer "únicamente" para dar cobertura al concurso de adjudicación de potencia eólica, sino que se basará en "estudios rigurosos" acerca de las fuentes energéticas que se deben primar en Cantabria en la segunda década del siglo XX.
Preguntado por la emisión de un informe por parte de los Servicios Jurídicos del Gobierno, Mediavilla apuntó que "no han emitido ningún informe" relativo al procedimiento a seguir porque "no es necesario" en la fase actual, la del concurso de asignación de potencia.
En cualquier caso, indicó que los Servicios Jurídicos del Gobierno se "actúa siempre" y recordó, por ejemplo, que en su día informaron del decreto regulador de parques eólicos.
NO ADELANTAR HIPÓTESIS
A su juicio, el procedimiento que el Gobierno está llevando a cabo coincide con las reivindicaciones formuladas sobre la necesidad de tramitación ambiental e información pública.
Mediavilla, que se mostró partidario de "no adelantar hipótesis" en relación al futuro del desarrollo energético en la Comunidad, señaló que tanto la adaptación del Plenercan como la resolución del concurso eólico es competencia de la Consejería de Industria, no de la de Presidencia.
"MEA CULPA"
Con todo, y pese a las críticas recibidas, el consejero consideró que el Gobierno "no ha vilipendiado a nadie" en el proceso seguido hasta ahora, aunque reconoció que el Ejecutivo debe "entonar el mea culpa" ya que no se ha explicado "bien" el procedimiento, que es "complejo", apostilló.
Agregó que el procedimiento seguido es "perfecto" desde el punto de vista jurídico, y negó que haya alguna "discrepancia" en el seno del Gobierno, que apuesta por las energías renovables, en consonancia con el mandato de la Unión Europea (UE) y al que Cantabria "no es ajena".
