MADRID, 30 Sep. (CHANCE) -
A Belén Esteban se le acumulan los temas. A su problemas con Toño Sanchís y su futuro juicio con su exrepresentante, se añade ahora la ausencia de Jesulín de Ubrique en la vida de su hija Andrea.
La de Paracuellos no ha tenido ningún problema en confesar en Sálvame que su hija llega un año sin ver a su padre, un auténtico drama para ella que no puede reprimir en público. "A mí mi hija me ha dicho que no hable de esto, pero si no lo suelto, reviento", explicaba en Sálvame.
Y es que como confirmaba la propia Belén, Jesulín lleva un año sin ver a Adreíta. Pero a la falta de visitas por parte del torero se suma la ausencia total de contacto: "En noviembre hace un año que Jesulín no ve a su hija y no la llama desde su cumpleaños". Por lo que afirma la Esteban, desde el pasado 20 de julio no hay relación entre padre e hija. Una fecha en la que la joven cumplió 17 años rodeada de su familia materna. Respecto a si su hija quiere ser un personaje público o no, la colaboradora de Sálvame lo tiene claro: Andrea Janeiro Esteban quiere total y absoluto anonimato; por ese motivo, cuando cumpla 18 años podría marcharse al extranjero para estudiar una de las carreras que más le llaman la atención, periodismo musical.
Sin relación con el padre de su hija, Belén Esteban trata de lidiar con sus problemas personales mientras prepara el duro e intenso juicio que la enfrentará con el que fue su hombre de confianza, Toño Sanchís.
