MADRID, 13 Mar. (CHANCE) -
Este fin de semana saltaba la noticia de que la Infanta Cristina querría borrar lo sucedido y estaría planeando limpiar su honorabilidad después de haber sido absuelta de dos delitos fiscales por el Caso Nóos, según el testimonio de uno de sus abogados, Pau Molins, a 324 de TV3.
Para la defensa de la hija de los Reyes Juan Carlos y Doña Sofía, esas imágenes han hecho mucho daño: "Aunque sea para, el día de mañana, tener un papel para sus hijos que diga que nunca se tendría que haber sentado en el banco de los acusado" explicaba Molins y así pediría el derecho al olvido para intentar eliminar las imágenes de la Infanta en el juicio.
Sin embargo, el también abogado de Cristina de Borbón, Miquel Roca negaba que se vaya a interponer recurso de casación, de momento: "No se pondrá, no se pondrá. No hay recurso. No hay necesidad y por lo tanto no hay recurso. Hay unas posibilidades de estudiarlo, de analizarlo pero no hay recurso".
El letrado ha querido dejar claro que la mujer de Iñaki Urdangarin: "Nunca se ha manifestado en este sentido. Siempre hemos decidido estudiarlo y analizado bien entiende que no hay motivo para interponer. Puede haber motivo o no para interponer el recurso, pero no le parece que deba mantener esta posición".
El que fuera padre de la Democracia ponía el punto de sentido común en cuanto a lo que a la Infanta le debe de preocupar actualmente: "Yo supongo que también cuenta mucho que aquí habrá lógicamente un protocolo ante el Supremo y en el recurso de casación que afecta a otros personajes en este proceso -entre ellos a su propio marido- y me parece que todo el mundo podrá entender que en este momento su principal preocupación sea la de su marido y no la suya propia en un momento como este".
Aun así, Roca ha querido destacar de quien es la última palabra, aunque el bufete planteara el recurso de casación: "Me parece muy académicamente correcto, porque tiene base y es su obligación defender esta posición porque motivos podía haberlos. La decisión personal de nuestra patrocinada es fundamental, es su voluntad la que tiene que decidir no nosotros".
En cuanto a si entonces el caso estaría zanjado vuelve a recalcar la decisión de la Infanta Cristina y que de ella depende todo: "No es una decisión de nuestro bufete, es una decisión de la Infanta. En este momento su decisión es firme, no habrá recurso, y para nosotros quedan temas como la ejecución de la previa sentencia, devolución de fianzas, una cantidad de cosas muy casi artesanales.... Ejecución propiamente de la sentencia... No tiene más trascendencia".
Con la sensatez habitual, Miquel Roca deja entrever lo que ha aconsejado, o lo que creemos nosotros que ha aconsejado a su defendida: "Esto para nosotros es un debate jurídico, es un debate con fundamento y con razones. Para los interesados es un debate muy distinto, un debate de libertad, convivencia, conformación de la vida familiar y por lo tanto esos argumentos pesan mucho. En este momento, la Infanta no tiene deseo de seguir en un proceso donde está su marido, por el que ella desea que se acate a la justicia en un sentido que sea favorable para sus posiciones. Yo creo que esto es lo fundamental y que no tiene sentido que nosotros discutamos académicamente, jurídicamente o judicialmente lo que es una decisión muy personal de la propia interesada".
