MADRID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) - El descubrimiento final fue detectado en los datos del instrumento de satélite Aqua MODIS de la NASA, que imágenes en el infrarrojo térmico en una resolución de 1 km, y confirmado por el instrumento Suomi VIIRS de la NASA. El desarrollo de la fisura durante el último año fue monitoreado usando datos de los satélites Sentinel-1 de la Agencia Espacial Europea - parte del componente espacial europeo de Copérnico. Sentinel-1 es un sistema de imagen de radar capaz de adquirir imágenes independientemente de la cobertura de nubes, y durante todo el período de invierno actual con oscuridad polar. El iceberg es uno de los más grandes registrados y su progreso futuro es difícil de predecir. Puede permanecer en una sola pieza, pero es más probable que se rompa en fragmentos. Parte del hielo puede permanecer en el área durante décadas, mientras que partes del iceberg pueden derivar hacia el norte en aguas más cálidas. El equipo supervisó el desarrollo anterior de la fisura usando una técnica llamada interferometría de radar satelital (SRI) aplicada a las imágenes Sentinel-1 de la ESA. Mientras que la fisura sólo es visible en las imágenes de radar cuando tiene más de 50 m de ancho, al combinar pares de imágenes, el SRI permite detectar el impacto de cambios muy pequeños en la geometría de la plataforma de hielo, y controlar la punta de la grieta con precisión. Adrian Luckman de la Universidad de Swansea añadió: "En los meses y años siguientes, la plataforma de hielo podría volver a crecer gradualmente, o puede sufrir otros eventos de parición que eventualmente pueden conducir al colapso - las opiniones en la comunidad científica están divididas. Nuestros modelos dicen que será menos estable, pero cualquier colapso futuro permanece a años o décadas en el futuro".