MADRID, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los hermanos Kitty, Daisy & Lewis llegan este fin de semana a España, donde ofrecerán dos conciertos para los que se ya han agotado todas las entradas: este sábado estarán en Barcelona y el domingo en Barcelona, donde dispararán buenas dosis de blues, R n' B, soul, rock, countray, jazz y psicodelia.
La familia Durham no recuerda en qué momento comenzó esta historia musical y los miembros del grupo solo saben que su pasión por la música surgió cuando aún eran muy pequeños. "Crecimos tocando música y terminamos en el escenario", ha señalado Lewis durante una entrevista telefónica concedida a Europa Press.
Desde entonces, solo han tocado con esta formación y ni se imagina lo que supondría formar parte de una agrupación con la que después de un ensayo no permaneciera unido. "Es duro a veces pero se lleva bien", ha destacado.
Su referente siempre fue su padre, a quien vieron cantar y tocar la guitarra canciones desde pequeños que después se quedaron grabadas en sus memorias, algo "inevitable", según ha asegurado Lewis, y que los llevó a interpretar música ante un público que cada vez es más numeroso.
Lewis toca habitualmente la guitarra. Sin embargo, según ha indicado, lo que les distingue de muchas otras bandas es que los tres hermanos tocan varios instrumentos en diferentes canciones, un cambio de ritmo y de atmósfera que otorga una dinámica especial al grupo.
Armónica, batería, percusión, ukulele, banjo, trombón, guitarra, lap steel, piano, acordeón o xilófono. La lista de instrumentos es casi infinita y a esto, según indica Lewis, se unen sus eclécticos gustos musicales, que van desde cumbia colombiana o el calipso procedente de Trinidad y Tobago.
'THIRD', NUEVOS TIEMPOS
'Smoking in Heaven' se publicó en 2011 y han pasado cuatro años hasta que el grupo ha publicado su tercer trabajo discográfico, que escoge 'Kitty, Daisy & Lewis the Third' como título. El motivo de haber tardado tanto es aparentemente sencillo, según explica Lewis: "Estábamos de gira, no tuvimos tiempo".
Sin embargo, lo cierto es que esperaban a dar un gran paso en su música: un nuevo estudio de grabación que sustituiría al pequeño espacio con un ocho pistas en el que, tal y como asegura, habían grabado hasta entonces.
La espera se dilató más de lo esperado por los tres hermanos, así que simplemente dedicaron más tiempo a ensayar ellos solos y también con el productor de este disco, Mick Jones, quien "llevaba su guitarra a estos ensayos y se aprendía las canciones".
"Fue algo grande, influyó en el resultado y en el estudio tenía siempre buena vibra, sonaba fantástico y proponía pruebas", ha destacado Lewis. En este sentido precisa que aunque son quienes son y hacen lo que hacen, "el hecho de que él estuviera ahí" ha sacado de ellos cosas que de otra manera no habríamos visto".
