MADRID, 31 DE AGOSTO (EDIZIONES)
La segunda jornada de Liga ha dejado buen sabor de boca a los aficionados del Atlético de Madrid y del Real Madrid. Los dos equipos de la capital de España consiguieron llevarse el triunfo ante sus rivales, Sevilla y Betis, de una manera brillante. Los equipos sevillanos poco pudieron hacer para evitar la derrota ante los madrileños, que fueron mejores durante todo el partido.
El Real Madrid se impuso con todo merecimiento al Real Betis por 5 goles a 0. Los blancos, que venían de hacer un partido algo más que discreto en Gijón, salió a demostrar que son capaces de jugar muy bien al fútbol, de dar espectáculo y de ganar a cualquiera que se les ponga por delante. Y así fue. Desde el minuto lo dejó claro. O desde el 2, con el gol de Gareth Bale tras un centro fantástico, medido a la cabeza, de James Rodríguez. Sin duda el colombiano fue la figura del partido, con dos goles y una asistencia de gol.
James quería reivindicarse ante Benítez. Sorprendió sus suplencia en el primer partido de liga. En este segundo, quiso dejar claro que él es indispensable en este equipo. Y lo consiguió. Se hizo el amo y señor del equipo, del encuentro, y también, del espectáculo. Los dos goles que anotó el colombiano fueron de una belleza plástica tremenda, tanto el primero de falta, como el segundo de chilena. Fantásticos los dos goles. Y fantástico el encuentro de los blancos, que hicieron olvidar a sus aficionados el mal comienzo de liga de la jornada anterior.
El Atlético de Madrid también necesitaba hacer un buen partido. Primero, para convencer a sus aficionados de que este año puede aspirar a todo y haciendo un buen fútbol, además. Y Segundo, porque se enfrentaba a uno de los mejores equipos del momento, el Sevilla. Los del Cholo salieron a por todas, y fueron capaces de llevarse el partido en el Sánchez Pizjuán. Un campo complicadísimo de sumar puntos.
Los rojiblancos fueron superiores en todos los aspectos. No dieron prácticamente ninguna oportunidad a su rival para meterse en el partido, y se mostraron superiores de principio a fin. Destacaron dos figuras en este partido. Ambas rojiblancas: Óliver Torres y Griezmann. Los dos llevaron la batuta del juego del Atleti. Uno dirigiendo el juego defensivo e hilando con el ataque. El otro, llevando el ataque con peligro hasta la portería rival. Dos jugadores que parecen entenderse bien y que van a crear mucho peligro a cualquier rival que se le ponga por delante.
Dos victorias consecutivas. El Atlético de Madrid se llevó la victoria frente a Las Palmas, pero con un juego que no convenció a nadie. Ahora, el Atleti juega, gana y convence.
En cambio, esta jornada no deja un buen regusto a los aficionados blaugranas. Es cierto que ha vuelto a ganar, que tiene 6 puntos y que ya le saca dos al Real Madrid. Pero el juego de los de Luis Enrique no acaba de convencer a unos ni a otros. El Barcelona está metido en una dinámica de juego gris, sin mucha proyección atacante y con poca creación e imaginación.
Su juego está siendo muy previsible y no tiene mucha pólvora arriba. Es cierto que los problemas defensivos enormes de los que adolecía, han sido subsanados, al menos en parte, ya que no tiene tantos errores. Pero la faceta ofensiva está bajo mínimos. Dos goles en dos partidos frente a rivales, en principio, asequibles, es un bagaje un poco corto para el campeón de liga.
Messi no está apareciendo en el juego, y eso se nota. El Barça, sin Messi, es medio Barça. Y si tampoco está fino Luis Suárez, y si Neymar no juega a su nivel... Pues eso, aparecen un Barça gris y otro tipo de jugadores al rescate: en este caso Vermaelen. Se espera que el equipo azulgrana mejore su fútbol, desde luego. Porque la sensación que hay es que cuando se enfrente a un equipo grande, este Barcelona, tal y como está jugando ahora, no tiene opciones.
