MADRID, 27 (EUROPA PRESS) El Tesoro Público ha bajado la rentabilidad ofrecida a los inversores en la primera subasta que se celebra tras el anuncio del plan de compra de activos públicos y privados del Banco Central Europeo (BCE) y el triunfo de Syriza en las elecciones griegas y ha situado el interés del papel a 3 meses en el 0,0%, el mínimo histórico. El organismo, que esperaba captar entre 2.000 y 3.000 millones de euros en letras a 3 y 9 meses, ha colocado 2.561,93 millones y ha conseguido así quedarse en la parte media del rango. La demanda, por su parte, ha sido alta y ha superado los 7.600 millones de euros. En concreto, el Tesoro ha colocado 561,31 de los 2.371,31 millones pedidos por los inversores en letras a 3 meses. De hecho, la demanda ha superado en 4,2 veces lo vendido (3,2 veces en la anterior subasta). Los intereses de estas letras se han moderado considerablemente respecto a la subasta de diciembre. En concreto, el tipo medio ha pasado del 0,200% al 0,018%, mientras que el marginal ha caído al 0,030% desde el 0,209% y ha vuelto a marcar un mínimo de la serie histórica. Por otro lado, el organismo ha vendido 2.000,62 de los 5.240,62 millones solicitados por el mercado en letras a 9 meses, tras registrar unas peticiones que han superado en 2,6 veces lo colocado (2,7 veces en diciembre). En este caso, los intereses también han bajado respecto a los resultados de diciembre. En concreto, el tipo medio ha pasado del 0,373% al 0,137%, mientras que el marginal ha caído al 0,143% desde el 0,382% anterior y se ha situado también en niveles mínimos. Desde el comienzo del año el Tesoro ha captado 19.566 millones de euros, un 13,8% de la previsión de emisión a medio y largo plazo para todo el año (141.996 millones). El coste medio de la deuda del Estado a la emisión se situó en el 1,52% en diciembre de 2014, frente al 2,45% de finales de 2013. El organismo ha cerrado así con éxito la última subasta de enero y la primera tras conocer el plan del BCE de realizar compras de activos por importe de 60.000 millones de euros al mes al menos hasta septiembre de 2016 y hasta que se aprecie un ritmo sostenido en la inflación consistente con el objetivo de estabilidad del BCE. De hecho, el anuncio provocó un significativo descenso en los costes de financiación de la deuda de la mayor parte de los países de la eurozona durante la pasada semana, que en el caso de España llegó a situarse por primera vez por debajo del 1,30%, mientras el euro renovaba mínimos desde 2003 al caer a menos de 1,13 dólares. Pese a la mejora que ha provocado el plan del BCE, los mercados también recogieron cierta tensión derivada del resultado de las elecciones griegas, que finalmente dieron la victoria a Syriza y provocaron cierta incertidumbre al inicio de esta semana. Sin embargo, estas tensiones, que sí han hecho que la prima de riesgo española vuelva a situarse por encima de los 100 puntos básicos, no parecen haber afectado al Tesoro, que ha superado con éxito la subasta y ha logrado reducir la rentabilidad ofrecida a los inversores.
