MANILA, 15 Ene. (Reuters/EP) -
Tres cooperantes del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), entre ellos un italiano y un suizo, fueron secuestrados hoy en el sur de Filipinas por milicianos presuntamente miembros del grupo islamista Abú Sayyaf, según informaron fuentes oficiales.
El director de la Cruz Roja Filipina, senador Richard Gordon, precisó a Reuters que los tres cooperantes, entre los que figura una filipina, circulaban en un vehículo de la Cruz roja en la isla de Jolo cuando fueron detenidos y secuestrados por hombres armados. Otros tres filipinos que viajaban con ellos fueron robados de sus posesiones pero no secuestrados, según la Policía.
Según el CICR, el secuestro se produjo a unos metros de una prisión que el equipo acababa de visitar en el marco de un proyecto de agua. Los rehenes han sido identificados como Andreas Notter, un suizo de 38 años, Eugenio Vagni, un italiano de 62, y Mary Jean Lacaba, una filipina de 37.
El Ministerio de Exteriores de Italia confirmó la identidad del ciudadano italiano secuestrado. "Los familiares ya han sido avisados", informó el gabinete de prensa del Ministerio, que está siguiendo de cerca los acontecimientos junto con la Embajada italiana en Manila.
Según indicó el Cuerpo de Marines y la Policía de Jolo, la alarma se desencadenó cuando los tres cooperantes no llegaron a tomar un vuelo que tenían reservado. Fue entonces cuando se lanzó su búsqueda. "Estamos realizando una persecución en caliente", afirmó el jefe de la Policía de la provincia de Sulu, de la que Jolo es capital, Julasirim Kasim.
Una portavoz militar, teniente Steffani Cacho, indicó que los soldados han recuperado el vehículo del CICR y que los habitantes les indicaron que los secuestradores se han llevado a los rehenes al interior montañoso de la isla.
Por el momento ningún grupo ha reivindicado el secuestro, pero la Policía indicó que Albader Parad, un importante dirigente de Abú Sayyaf, uno de los grupos más sangrientos que operan en Filipinas, es responsable del rapto. El grupo es famoso por sus secuestros y se estima que tiene unos 350 miembros en Jolo y en la isla próxima de Basilán.
Así las cosas, el presidente de la Cruz Roja Filipina hizo un llamamiento a "Abú Sayyaf a que libere a estas personas, pero son neutrales en cualquier conflicto". Los secuestradores "no se dan cuenta de ello, pero estas personas les ayudan si resultan heridos y les sacan de las zonas de conflicto", añadió Gordon.
Una portavoz de la presidenta filipina, Gloria Macapagal Arroyo, dijo que se ha ordenado al Ejército y la Policía que persiga a los secuestradores y "se asegure de que las víctimas son rescatadas ilesas, ya que su seguridad es siempre una gran preocupación".
