VITORIA, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -
El diputado general de Álava, Javier de Andrés, ha informado este martes que se ha detectado un fraude del 65 por ciento entre los jóvenes extranjeros que afirmaban ser menores de edad para acogerse al servicio de centros de acogida de la Diputación de Álava para menores extranjeros no acompañados, y ha anunciado que cuenta con un nuevo protocolo que "agiliza" los trámites para realizar las pruebas óseas que determinan la edad en los casos de "duda razonable".
De andrés ha realizado estas declaraciones en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno en la que ha hecho referencia a la denuncia de una plataforma popular sobre la expulsión de una veintena de jóvenes extranjeros de centros de acogida de la Diputación de Álava, después de que diferentes pruebas óseas determinaran que tienen más de 18 años.
El diputado general alavés ha recordado que la institución foral tiene una "trayectoria importante" en relación a "fraudes" relacionados con los menores extranjeros y ha explicado que la diputada de Asuntos Sociales, Marta Alaña, se reunió con la Fiscalía de menores, representantes de la Policía Nacional, la subdelegación del Gobierno central, forenses y Osakidetza, para acordar un nuevo protocolo que agilizara los trámites para conocer si hay mayoría de edad en las personas que se acogen a este servicios de la Diputación.
En este sentido, ha informado de que el tiempo que se tardaba en determinar si los jóvenes acogidos son menores de edad se ha reducido pasando de cinco meses a 20 días. Por ello, ha felicitado a la diputada Alaña y al resto de implicados y ha recordado que la "responsabilidad y obligación" de Álava es acoger a los menores de edad no acompañados. "Ésta es nuestra obligación y no vamos a cejar en ello", ha insistido.
De andrés ha explicado que, tras hacer las pruebas óseas, se ha detectado un "fraude" del 65 por ciento, y ha resaltado que las personas que realizan las pruebas y certifican la mayoría de edad de estos jóvenes, lo hacen desde una posición "muy garantista". "Nos encontramos que quienes no disfrutan de la atención de los menores son personas que no tenían ese derecho y que estaban faltando a la verdad", ha indicado.
Asimismo, ha informado de que la institución foral tenía "dudas muy razonables" sobre la existencia de personas que decían ser menores en los centros forales. En concreto, ha explicado que, cuando se dirigieron a los menores para pedirles que se hicieran la prueba, algunos abandonaron el centro sin llegar a hacérsela y, en otras ocasiones, detectaron personas que ya habían sido calificadas como mayores de edad en otras comunidades autónomas.
Por todo ello, ha reconocido que está "satisfecho" con la actuación del Departamento foral de Asuntos Sociales y ha insistido en que seguirá prestando atención a los menores. "No se prestará atención a quien no es menor y ha estado engañando, lo que significa que podremos atender mejor a los menores y a las personas en situación de necesidad", ha concluido.
