Actualizado 22/04/2010 15:45

La Hermandad Obrera Católica celebra el domingo su día anual dedicado a los trabajadores emigrantes durante la crisis

MADRID, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) celebrará, el próximo domingo 25 de abril, el 'Día de la HOAC', una jornada en la que las 44 diócesis en las que está presente desarrollan diferentes actividades centradas en la realidad de los trabajadores y trabajadoras emigrantes en el contexto actual de crisis.

Bajo el lema 'Romper fronteras, construir humanidad', esta organización quiere mostrarle a la sociedad que la emigración "ha sido y es una oportunidad de riqueza" para España y quiere que no sea vista como "un problema de seguridad". Además, desde 1991 desarrolla el Fondo de Solidaridad Internacional, un sistema de fondos "obtenido por donaciones de los propios militantes" para formar a otros militantes como "promotores de un nuevo mundo".

Según explicó el responsable general del Compromiso de la hermandad, Salvador Tejeda, el 12 por ciento de la población española es emigrante, "sin contar las 900.000 personas que se encuentran en situación irregular", por lo que considera "necesario" hacer llegar el mensaje de que los emigrantes son "igual de víctimas que los autóctonos" de la crisis que padece el país.

Además, señaló que este colectivo no puede ser tratado como "desecho, que ahora no sirve pero luego sí" y apostó por construir una sociedad en la que "no existan conflictos" entre emigrantes y autóctonos ya que, a su juicio, esta situación viene dada por la "mala distribución de los recursos".

Por su parte, la presidenta de la HOAC, Pino Jiménez, apuntó que "no corren buenos tiempo" para la emigración puesto que, tanto por los "partidos de derechas como por los de izquierdas", se está llevando a cabo una "política de cierre de fronteras, de atrincheramiento" que coinciden, además, en desarrollar "leyes nada progresistas".

Finalmente, el director del Secretariado de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar, Antonio González, afirmó que la Iglesia está con la gente "por el hecho de ser pobres" y aseguró que las personas empiezan a encontrar la "dignidad" en el momento en el que encuentran un trabajo porque "un mundo marginal no está reconocido".