MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -
Save the Children ha alertado de que miles de recién nacidos podrían enfermar e incluso perder la vida en Nepal por la situación en la que ha quedado el país tras los dos potentes terremotos sufridos en el último mes, el primero de ellos ocurrido el 25 de abril.
Unas 92.900 embarazadas sufrieron directamente los seísmos y muchas de ellas viven ahora fuera de sus casas, con frío y sin apenas refugio. En áreas como Sindhupalchok, Dolakha y Gorkha, el 73 por ciento de las instalaciones sanitarias que ofrecen cuidado sanitario a embarazadas han sufrido daños.
Con estos datos sobre la mesa, la coordinadora de salud para la respuesta de Save the Children en Nepal, Louisa Baxter, ha recordado en un comunicado que "los primeros días en la vida de un bebé son críticos porque son los días en los que se encuentran más vulnerables".
"Cosas tan básicas como no tener un instrumento esterilizado para cortar el cordón umbilical o no tener un lugar limpio y seco para dormir pueden resultar mortales para un bebé", ha advertido.
Baxter ha subrayado que "debe ser una prioridad" que "las madres tengan un lugar seguro donde dar a luz". La ONG, además de poner en marcha clínicas móviles, también distribuye kits para madres y bebés, así como lotes para partos.
AGUA
Save the Children teme que, con la llegada de la temporada del monzón en unas semanas, aumentará el riesgo a que se propaguen enfermedades, especialmente las que se transmiten a través del agua, como el cólera.
Rupa, madre de un bebé de tres meses, ha contado que el agua que utilizan para beber "está saliendo amarilla" y el suelo donde duermen "está mojado". "Me preocupan mucho los niños pequeños, los adultos podemos vivir fuera con frío si nos alimentamos bien pero, ¿cómo sobrevivirán los bebés?", ha preguntado.
