JERUSALÉN, 25 Abr. (Reuters/EP) -
Un exmiembro de las fuerzas de seguridad de Israel ha sido condenado a nueve meses de cárcel por la muerte de un manifestante palestino de 17 años que perdió la vida durante unas protestas en 2014, al considerar que cometió un delito de homicidio imprudente.
Inicialmente, el acusado, Ben Deri, se enfrentaba a cargos más graves, ya que la Fiscalía consideraba que había sustituido de forma deliberada las pelotas de goma por munición real para abrir fuego contra un grupo de palestinos el 15 de mayo de 2014.
Nuwara recibió un disparo en el pecho que le costó la vida. Un segundo adolescente también perdió la vida en el mismo incidente, aunque en este caso la Fiscalía no presentó cargos al considerar que la autopsia no había permitido recabar suficientes pruebas.
Deri ha reducido la posible condena --de hasta 20 años-- tras confesar y convencer al juez de que había disparado fuego real por error, ya que creía que estaba utilizando material antidisturbios. Así, el acuerdo final describe lo ocurrido como un accidente.
El tribunal ha condenado a Deri a nueve meses de prisión y una pena adicional de seis meses en suspenso, pese a que las leyes israelíes castigan el homicidio imprudente con penas de hasta tres años. Además, le ha ordenado indemnizar a la familia del fallecido con 50.000 shéquels (unos 11.400 euros).
"Así no se hace justicia", ha lamentado el padre del joven, Issam Nuwara, en declaraciones a la agencia Reuters. "No esperaba que un tribunal israelí hiciese justicia por mi hijo muerto, pero hice todo lo posible para presentar un caso sólido y dejar en evidencia ante el mundo al sistema judicial", ha afirmado.
El proceso recuerda a otros similares contra policías y militares israelíes acusados de agredir e incluso matar a palestinos. El caso más polémico ha sido el de Elor Azaria, un soldado que remató en el suelo en 2016 a un supuesto atacante y que, tras ser condenado a 14 meses de cárcel, previsiblemente saldrá libre en mayo tras purgar dos terceras partes de la pena.
