EEUU abordó con militares venezolanos un posible golpe de Estado contra Maduro, según el 'NYT'

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, en un acto militar
REUTERS - Archivo
Actualizado: sábado, 8 septiembre 2018 23:28

NUEVA YORK, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -

Cargos de la Administración del presidente estadounidense, Donald Trump, han mantenido reuniones con militares venezolanos para abordar la posibilidad de impulsar un golpe de Estado contra el presidente Venezolano, Nicolás Maduro, según ha revelado este sábado el diario 'The New York Times'.

Un oficial de alta graduación venezolano cuyo nombre no ha trascendido sería el máximo responsable de esta iniciativa. Este alto cargo estaría en la lista de sancionados por el Gobierno estadounidense. Finalmente la parte estadounidense decidió no ayudar a los conspiradores, por los planes golpistas se congelaron.

La investigación del diario apunta a que los militares venezolanos contactaron previamente con la Administración de Barack Obama, pero fueron rechazados. Sin embargo, con la elección de Trump y sus declaraciones de que no descartaba la opción militar, se movilizaron de nuevo.

"Era el comandante en jefe el que decía esto ahora", ha afirmado el oficial de alto rango venezolano en una entrevista. Las reuniones comenzaron en septiembre de 2017 y prosiguieron este año. En ellas los venezolanos plantearon que representaban a cientos de miembros de las fuerzas armadas descontentos con Maduro.

Concretamente pidieron a Estados Unidos aparatos de radio con tecnología de encriptación para poder comunicarse de forma segura para preparar la instalación de un gobierno de transición que convocaría elecciones. Sin embargo, Washington no dio esos aparatos y los planes se descubrieron y fueron detenidos una docena de conspiradores.

El oficial ha explicado que hay al menos tres grupos distintos dentro que han conspirado contra el Gobierno venezolano. Uno de ellos contactó con el Gobierno estadounidense mediante la Embajada americana en una capital europea.

WASHINGTON TEMÍA QUE FUERA UNA TRAMPA

En ese momento, la Casa Blanca dijo estar intrigada y atenta ante el riesgo de que fuera una trampa para dejar en evidencia una injerencia en Venezuela. A medida que la situación empeoró en el país caribeño, Washington se mostró más dispuesto a correr el riesgo y a los militares que querían un cambio político.

"Después de mucha discusión, acordamos que deberíamos escuchar lo que tenían que decir", ha explicado un alto cargo norteamericano en declaraciones bajo condición de anonimato a 'The New York Times'.

La Administración Trump envió a un diplomático a las reuniones, pero no estaba autorizado a negociar nada. Sin embargo, los militares venezolanos no parecían tener un plan detallado de acción y que esperaban que los americanos les ofrecieran ideas y colaboración para idear un plan.

El ya excomandante venezolano aseguró que los militares nunca solicitaron a Estados Unidos una intervención militar. "Nunca acordé una operación conjunta, ni ellos la propusieron", ha subrayado. El objetivo era actuar en julio del año pasado, cuando tomó posesión la Asamblea Nacional Constituyente, pero abortaron el plan por temor a un baño de sangre.

Posteriormente decidieron realizar la toma del poder en marzo, pero los planes se descubrieron, por lo que decidieron posponer la operación hasta el 20 de mayo, día de elecciones presidenciales. Nuevamente se filtraron los planes, por lo que se canceló el plan.

Para que la conspiración tuviera éxito, se debía detener a Nicolás Maduro y a otros cargos de gobierno de manera simultánea. Para lograrlo, los militares necesitaban una forma de comunicación segura, por lo que solicitaron equipos al diplomático norteamericano durante su segunda reunión el año pasado. Los norteamericanos se negaron.

"Estabamos frustrados. No recibíamos señales de apoyo y me dejaron esperando", ha revelado el excomandante sobre la segunda reunión. Durante el tercer encuentro, a principios de este año, las negociaciones se estancaron y los estadounidenses no proveyeron de material o apoyo político a los planes de los militares.

Más de 150 militares han sido detenidos, y el excomandante venezolano indicó que probablemente estén siendo torturados. Se lamentó de la falta de apoyo táctico de Estados Unidos, la cual, a su juicio, pudo haber cambiado la historia del país. "Estoy decepcionado. Pero soy el menos afectado. Al menos no soy un prisionero", ha argumentado.