MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las investigaciones en torno al atentado perpetrado contra un autobús turístico en el aeropuerto de la localidad búlgara de Burgas se centran en torno a la participación en el mismo de Irán y el partido-milicia chií libanés Hezbolá, aunque también contemplan la posibilidad de que fuera ejecutado por la organización terrorista Al Qaeda o por extremistas turcos.
Alrededor de las 18.00 horas del miércoles, un hombre hizo detonar los explosivos que transportaba en su mochila en el interior del autobús en el que viajaba un grupo de turistas israelíes cuando se encontraba en el aeropuerto de la localidad. Al menos ocho personas --cinco turistas israelíes, dos ciudadanos búlgaros y el responsable del ataque-- fallecieron en el atentado, mientras que otras 32 personas resultaron heridas.
El sospechoso, un hombre caucásico con el pelo largo, llevaba un pasaporte estadounidense y un carné de conducir del estado de Michigan, que podrían ser falsos, ya que la base de datos del FBI no ha encontrado coincidencias al introducir los datos. De momento, se desconoce cómo pudo conseguir la documentación falsa y cómo y cuándo entró al país.
El ministro de Exteriores de Israel, Avigdor Lieberman, ha confirmado en una entrevista concedida al diario búlgaro 'Trud' que la principal línea de investigación gira en torno a Irán y Hezbolá. En las investigaciones participan miembros de los servicios de Inteligencia búlgaros, israelíes y estadounidenses.
El exjefe de los Servicios de Inteligencia de Bulgaria Kircho Kirchev, las otras opciones barajadas son la responsabilidad de Al Qaeda o de terroristas turcos en respuesta por el abordaje al barco 'Mavi Marmara', que formaba parte de la Flotilla de la Libertad --que transportaba ayuda humanitaria y pretendía romper el bloqueo a la Franja de Gaza--, en el que fallecieron nueve ciudadanos turcos.
Las autoridades búlgaras han subrayado que el responsables del ataque contó con la ayuda de varias personas en el país, que eran, al parecer, ciudadanos libaneses o islamistas radicales búlgaros, según ha informado la cadena de televisión búlgara bTV.
Asimismo, las investigaciones han revelado que el explosivo utilizado era de fabricación casera y extremadamente potente. A pesar de que ya se ha conseguido el ADN y las huellas dactilares del atacante, su identidad sigue siendo desconocida, según ha informado la agencia de noticias búlgara Sofia.
Por otra parte, el conductor de taxi que trasladó al presunto atacante hasta el aeropuerto de Burgas está siendo interrogado, aunque no han salido a la luz los detalles del interrogatorio.
La Fiscalía de Burgas ha dicho que antes del ataque, el hombre pasó algún tiempo en la localidad costera de Ravda, donde intentó alquilar un coche, lo que no consiguió a causa de las sospechas que levantó su carné de conducir, aparentemente falso.
