MADRID, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
El líder supremo de Irán, Alí Jamenei, ha afirmado este miércoles que el debate entre los candidatos a la Presidencia de Estados Unidos muestra "las catástrofes que sufre el país".
"Los candidatos presidenciales (la demócrata Hillary Clinton y el republicano Donald Trump) muestran sin querer las realidades y catástrofes de Estados Unidos, de las que llevamos años hablando", ha sostenido.
Así, ha sostenido que en dichos debates "se ha mostrado la realidad de la caída de los valores humanos en Estados Unidos", según el texto de sus declaraciones publicado en su propia página web.
"La falta de valores humanos y Derechos Humanos y la existencia de discriminación y racismo son realidades en la sociedad estadounidense actual", ha dicho, apuntando a las polémicas sobre discriminación racial y distribución de la riqueza durante los debates.
En un discurso con motivo del 37º aniversario del asalto a la Embajada de Estados Unidos en Teherán, Jamenei ha criticado además a los que presentan el acercamiento a Washington como la solución a los problemas del país.
"Creer que si nos comprometemos con Estados Unidos se solucionarán todos los problemas del país es una forma peligrosa de pensar", ha valorado el líder supremo iraní.
En este sentido, ha puesto como ejemplo el acuerdo nuclear "y la actitud de Estados Unidos después de ello", lamentando la continuada exclusión de Irán del sistema bancario mundial y la decisión de Washington de mantener sus sanciones contra Teherán.
"Negociar con Estados Unidos no solucionará nuestros problemas. Primero, porque son deshonestos y apuñalan por la espalda, segundo, porque Estados Unidos hace frente a una crisis", ha argumentado.
"Dicen que deberíamos negociar con Estados Unidos sobre asuntos relacionados con Siria, (el partido-milicia chií libanés) Hezbolá, Irak, Afganistán, Yemen y nuestros asuntos internos. ¿Querrá un régimen que no puede poner fin a su odio hacia la nación iraní solucionar los problemas del país?", se ha preguntado.
Por último, Jamenei ha resaltado que las organizaciones internacionales y el propio Gobierno estadounidenses "deben reconocer que Estados Unidos sufre una crisis económica, política, internacional y moral".
