MANILA, 20 Sep. (Reuters/EP) -
Las fuerzas de seguridad filipinas han matado a nueve rebeldes maoístas en uno de los enfrentamientos más sangrientos que se han producido en el país desde que comenzaron las negociaciones de paz el pasado mes de mayo para poner fin a un conflicto que ya dura más de cinco décadas.
Un comandante del Ejército filipino ha resultado herido durante el intercambio de disparos que se ha producido durante más de 25 minutos en la provincia rural de Nueva Ecija, a 220 kilómetros al norte de Manila, según ha informado el portavoz militar, el coronel Isagani Nato.
Nato ha explicado que las fuerzas de seguridad se trasladaron de forma inmediata después de recibir información sobre la presencia de hombres armados en la zona. Los enfrentamientos se produjeron contra cerca de veinte guerrilleros del Nuevo Ejército Popular (NPA, por sus siglas en inglés).
Más de 40.000 personas han perdido la vida a causa de los enfrentamientos entre la insurgencia comunista y el Gobierno. Las últimas conversaciones de paz, se retomaron en Noruega en agosto de 2016, días después de que el presidente filipino, Rodrigo Duterte, liberase a decenas de milicianos comunistas. Se llegó a un acuerdo de alto al fuego que duró cuatro meses.
No obstante, Duterte puso fin a las conversaciones de paz en enero este año después de que los rebeldes retomasen la vía armada y llevasen a cabo varios ataques contra puestos militares y zonas urbanas habitadas por civiles. El pasado mes de mayo, el mandatario prometió que retomaría las negociaciones siempre cuando los rebeldes firmen un alto al fuego, dejen de reclutar y pongan fin a sus labores de extorsión contra los negocios locales.
