MADRID, 2 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Programa Mundial de Alimentos (PAM) de Naciones Unidas ha batido este mes de agosto su propio récord al distribuir comida para cerca de 4,1 millones de personas afectadas por la guerra de Siria gracias a las mejoras en el acceso fronterizo.
El pasado 25 de julio, cinco convoys del PAM lograron acceder a Siria desde Turquía, a través de Bab Al Salam, y desde Jordania, por Al Ramtha. Los camiones de la organización llevaron arroz, lentejas, aceite, pasta, carne envasada, sal, azúcar y judías para unas 69.500 personas en Alepo, Idleb, Quneitra y Dara, zonas de difícil acceso.
Según el comunicado del PAM, el cumplimiento de la resolución 2165 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que autoriza el movimiento de la ayuda humanitaria en Siria a través de las cuatro fronteras, ha permitido llegar a más de 580.000 personas en las seis últimas semanas, cuatro veces más que las 137.000 personas atendidas en las seis semanas anteriores.
El coordinador regional de emergencias para la crisis de Sira del PAM, Muhannad Hadi, ha reconocido que el trabajo de la agencia permite llegar "cada día a más gente con la necesidad urgente de asistencia alimentaria, muchos de ellos llevan meses pasando hambre". Hadi espera también que "todas las partes del conflicto" faciliten su acceso hasta los afectados que siguen en zona de batalla.
Sin embargo, el PAM también ha denunciado que, a pesar de esta buena noticia, la expansión de los combates y la inseguridad hace particularmente difícil el acceso a las zonas del norte como Al Hassakeh, Deir al Zor y Ar Raqqa.
El PAM también ha aprovechado para recordar que necesita recaudar 35 millones de dólares (cerca de 27 millones de euros) a la semana para encontrar la comida necesaria con la que hacer frente a los desplazados y refugiados sirios.
